En su columna dominical de DIARIO DEL SUR, publicada este 14 de abril de 2024 e intitulada “Una vaca, para enterrar dos perros sarnosos” el maestro Buchón, popularmente conocido como Manuel Eraso Cabrera, hace referencia a la convocatoria realizada por los antioqueños en el ánimo de continuar con el desarrollo de importantes obras viales para su región.
Señala el entrañable Maestro Buchón que por «Acá la cosa es distinta», y recuerda con profunda nostalgia que hace algunos años «adoptó dos perros runas, y los bautizó con los nombres de moda de ese tiempo, al uno le puso Timbio, y al otro El Estanquillo…».
Recuerda, medio emberracado, que después de promesas presidenciales en las que se aseguraba que «la doble calzada Pasto – Popayán incluido el tramo Timbío el Estanquillo, está completamente financiado», ahora y después de casi dos años de gobierno se aclara en un debate de control político que «El presidente manda a decir al pueblo soberano de Nariño, que las intenciones se mantienen, pero que por ahora no hay plata…».
Razón tiene el Maestro Buchón de embejucarse y armar berrinches y pataletas y hace referencia a la actitud del gobernador de Nariño, que ante estos anuncios del gobierno central únicamente acierta a convocar a una juntanza. «Palabra de moda por estos tiempos…». Aciagos y negros tiempos como dice el Maestro Buchón.
Y en un profundo acto de reflexión de este maestro de la política y el periodismo acierta a decir que juntanza » es una montonera de tecnócratas que posan de sabios, hablando mierda y al final, nadie entiende ni se compromete…».
Si quiere hablar de paz, pero no sabe por donde arrancar, simplemente diga juntanza. Si metió las patas con nombramientos cuestionados y censurables, no se detenga ni tenga empacho alguno en gritar juntanza. Si aparecen escándalos en entidades, diga muy quedo juntanza. Si mira el panorama de gobierno oscuro y gris no lo dude, diga juntanza y el pueblo oprimido, como lo dice el maestro Buchón, no entenderá nada; pero celebrará el bello fonema que parece sacado de un tratado de metafísica y ficción. Seguramente al Maestro Buchón ya no lo invitarán a las juntanzas periodísticas de quienes promueven una paz con actores armados pero que excluyen y fusilan a periodistas críticos y de buen cacumen intelectual. No veremos al Maestro Buchón en las juntanzas, su bicicleta Monark no conocerá los patios de la gobernación. Quedará excluido. Por eso nos atrevernos a abogar por el Maestro Buchón para que no lo excluyan, que lo «ajunten» y lo inviten a una que otra juntanza.
El periodista Manuel Eraso Cabrera se une a esta humilde petición. Anuncia que en próximos días dará a conocer un manifiesto en el cual el Maestro Buchón ahonda en el término juntanza, se retracta de lo dicho y convoca al pueblo de Nariño a una JUNTANZA de olvidos y desmemorias. Con este apoyo puede el susodicho maestro dormir y descansar en paz, lo único que se le pide es que borre de sus cuadernillos su definición de juntanza: «Una montonera de tecnócratas qué posan de sabios, hablando mierda y al final, nadie entiende ni se compromete…».
Nos unimos a este llamado de juntanza por el maestro Buchón.

