En una nueva acción contundente contra el crimen organizado en el Pacífico colombiano, la Fiscalía General de la Nación judicializó a Aris Guillermo Preciado Ante, conocido con el alias de ‘Picoro’, por su presunta participación en una serie de secuestros extorsivos ocurridos entre los años 2021 y 2022 en el municipio de Tumaco, en el departamento de Nariño.
Según el informe oficial, el procesado estaría involucrado en la retención ilegal de al menos cuatro personas, todos ellos miembros del gremio de comerciantes y transportadores, en una de las zonas más conflictivas del suroccidente del país. Los hechos se desarrollaron en los barrios Panamá y Buenos Aires, sectores que históricamente han sido epicentro de operaciones de grupos armados ilegales.
Delitos
Durante las audiencias concentradas, un fiscal seccional del Gaula imputó a Preciado Ante los delitos de secuestro extorsivo y extorsión, ambos agravados. Aunque el capturado no aceptó los cargos, el juez de control de garantías consideró que existía un alto riesgo para la comunidad y el proceso judicial, por lo que ordenó su reclusión en un centro carcelario mientras avanza la investigación penal.
Un rol clave en la cadena delictiva
Las evidencias recogidas por los investigadores apuntan a que alias ‘Picoro’ tenía un papel determinante dentro de la estructura criminal que operaba en Tumaco. De acuerdo con el material probatorio y los testimonios de víctimas, era quien identificaba a las posibles personas a secuestrar, seleccionándolas dentro de sectores estratégicos de la economía local.
Hurtado
Una vez retenidas las víctimas, alias Picoro entraba en contacto directo con los familiares, a quienes les exigía el pago de sumas considerables de dinero para permitir la liberación de los secuestrados. Este patrón se repitió en varias ocasiones, generando temor y zozobra entre los habitantes de la zona, especialmente entre comerciantes, transportistas y pequeños empresarios.
Algunos de los afectados lograron identificar a Preciado Ante como el presunto responsable de realizar las exigencias extorsivas, lo que fue clave para sustentar la orden judicial que permitió su captura.
Alias Picoro fue detenido en una operación conjunta entre el Gaula de la Policía Nacional y el Gaula de la Armada Nacional, unidades especializadas en el combate al secuestro y la extorsión. La captura se efectuó mientras el hoy procesado se movilizaba por un sector del puerto de Tumaco, en cumplimiento de una orden emitida por un juez de garantías.