En el Pacífico nariñense, la Fundación Cueros y Chontas se erige como una escuela de cambio social, apostando por la salvaguarda y promoción del acervo cultural como una herramienta vital en la construcción de territorio y paz, donde los protagonistas son los jóvenes.
Con una visión arraigada en el empoderamiento de la comunidad y la preservación de sus tradiciones, esta organización ha desplegado un plan de acción innovador destinado a transformar los contextos de hombres y mujeres asentados en el Puerto.
Expresiones
Desde las aulas de su escuela, se promocionan diversas expresiones y manifestaciones artísticas y tradicionales propias del territorio. A través de procesos formativos dinámicos, la fundación busca transmitir este conocimiento ancestral a las nuevas generaciones, dotándolas así de herramientas para su desarrollo personal y comunitario.
«Estamos convencidos de que estos espacios no solo brindan oportunidades seguras para la juventud, sino que también los alejan de las tentaciones de la vida ilícita. Nuestro objetivo va más allá de la mera instrucción cultural; aspiramos a fortalecer valores que generen líderes positivos comprometidos con su región», señaló el representante legal de la fundación Cueros y Chontas, Oscar Nogales.
Promoción
Cueros y Chontas ha establecido una estrecha colaboración con 17 instituciones educativas, impulsando un enfoque intercolegial de promoción étnico-territorial. A través de esta plataforma, se fomenta un sentido de identidad y pertenencia en las nuevas generaciones, cultivando así el surgimiento de liderazgos comprometidos con el bienestar de la comunidad.
La fundación Cueros y Chontas, a través de su incansable labor, continúa desempeñando un papel fundamental en la transformación social y el fortalecimiento de la identidad cultural en el Pacífico nariñense. Su compromiso con el patrimonio cultural y el desarrollo comunitario constituye un ejemplo inspirador de cómo el legado cultural puede ser motor de cambio y progreso en las comunidades marginadas.