El pasado domingo, la carretera que conecta Pasto con el corregimiento de El Encano se convirtió en el escenario de una tragedia que ha dejado consternada a la comunidad. El accidente de tránsito involucró a una van de transporte escolar, resultando en la pérdida de dos vidas, se trata de Nixon Josa y Eiber Pejendino.
El vehículo accidentado, una van de transporte escolar de la empresa TatisTour con placas SQX 707, se desplazaba por la vía que cruza la zona del corregimiento de la Laguna cuando, por razones aún inciertas, se salió de la carretera. La van, que en ese momento transportaba a varios pasajeros, se volcó y dio múltiples vueltas antes de detenerse tras recorrer unos 20 metros desde el punto de impacto. La magnitud del siniestro generó una escena caótica y devastadora, que dejó a los testigos y a las autoridades locales conmocionados.
Informaciones preliminares
Nixon Josa, quien se desempeñaba en el transporte escolar, era ampliamente respetado por su compromiso con el servicio a los niños de la región. Su pérdida ha sido profundamente sentida por su familia, que incluye a su esposa e hijos, quienes enfrentan ahora un duelo inimaginable. Las primeras informaciones preliminares sugieren que Josa podría haber estado bajo los efectos del alcohol en el momento del accidente, aunque las autoridades aún están realizando las pruebas pertinentes para confirmar esta hipótesis.
El impacto de la tragedia no se limita únicamente a la pérdida de vidas. La demora en la llegada de los servicios de emergencia ha sido objeto de críticas severas. Los testigos del accidente informaron que la ambulancia tardó más de 45 minutos en llegar al lugar, un retraso que exacerbó la angustia y desesperación en la escena del siniestro. Esta situación ha generado un llamado urgente a las autoridades locales y regionales para que se tomen medidas efectivas que garanticen una respuesta más ágil y eficiente en futuros incidentes.
Alta peligrosidad
La comunidad afectada no solo llora la pérdida de Josa, sino que también demanda una revisión exhaustiva de las políticas de seguridad vial en la región. La carretera Pasto-El Encano, conocida por su belleza natural pero también por su potencial de peligrosidad, requiere una atención renovada en términos de infraestructura, señalización y controles de velocidad. Los residentes han señalado que es fundamental reforzar las medidas de seguridad y realizar campañas de concienciación para prevenir accidentes similares en el futuro.
El siniestro también ha puesto en evidencia la necesidad de implementar controles más estrictos para los conductores de vehículos de transporte público, así como para aquellos que operan en carreteras que atraviesan áreas rurales y de alta montaña. Las autoridades están trabajando en una investigación exhaustiva para determinar las causas exactas del accidente, y se espera que los resultados aporten claridad sobre las circunstancias que llevaron a esta tragedia. En el ámbito local, el dolor y la preocupación por la seguridad vial se han convertido en temas centrales de conversación. Los líderes comunitarios y las organizaciones de transporte están haciendo un llamado a la acción para mejorar la seguridad en las carreteras y garantizar que se realicen las inversiones necesarias en infraestructura y capacitación. La tragedia de este domingo se suma a una creciente lista de incidentes que han puesto en relieve las deficiencias en el sistema de transporte y emergencia, subrayando la urgencia de abordar estos problemas de manera integral.

