Por: Joan Sebastián Gómez (periodista)
La delincuencia que persiste y va en aumento en la capital nariñense tiene preocupadas a las autoridades tanto como a la ciudadanía. Las cifras en comparación con el anterior año se han incrementado de una manera exagerada y alarmante, el hurto en motocicleta es el que más se está llevando a cabo por los dueños de lo ajeno.
Un Consejo de Seguridad se vivió en estos últimos días donde presidieron autoridades como Policía Metropolitana de Pasto, Ejército Nacional, Fiscalía General, Contraloría General y Defensoría del Pueblo, y demás entidades que se reunión para evaluar los escenarios de zozobra y temor, además de proponer y tomar medidas contundentes frente a este flagelo.
Las diferentes Comunas de la ciudad de Pasto se han convertido en una amenaza para los habitantes, quienes se encuentran agobiados, intranquilos e inseguros. Los delincuentes no tienen vergüenza, a plena luz del día y sin importar la edad de a quien vayan a robar llevan a cabo su cometido, generando momentos de zozobra, miedo y pánico.
El panorama que se percibe lleva muchos años y a pesar de las estrategias que realizan las autoridades, el fortalecimiento de los operativos de control y las cámaras de seguridad implementadas nos han sido suficientes para combatir esta amenaza por parte de los delincuentes. Es necesario que se tomen acciones más afectivas que atemoricen a los ladrones y se abstengan de hurtar.
Las autoridades del municipio y del territorio nacional deben tomar el ejemplo o asemejarse a las acciones que viene tomando el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien si ha sabido cómo combatir la delincuencia. El mandatario ha dado golpes contundentes los cuales han dado excelentes resultados, tanto así que ciudadanos de diferentes partes del mundo han aplaudido estos planes de seguridad el cual le ha permitido recuperar sus territorios.
Puede interesarles: https://www.diariodelsur.com.co/las-elecciones-territoriales-estan-en-marcha/
Se deben tomar acciones drásticas y severas, de lo contario estos bandidos seguirán tomando el control de la ciudad., actuando sin que nadie les diga nada y cada día más lucrándose de lo ajeno. Estos escenarios de pánico y miedo deben acabar por el bienestar de la comunidad. Las autoridades deben devolverle la confianza al pueblo, garantizar la integridad y salvaguardar la vida de todos los pastusos.