En un hecho sin precedentes para la reforma agraria en Colombia, el expresidente Álvaro Uribe Vélez y la Agencia Nacional de Tierras (ANT) están cerca de cerrar la negociación para la venta de 200 hectáreas de El Ubérrimo, la icónica hacienda de la familia Uribe Vélez, ubicada entre Montería y San Carlos, en el departamento de Córdoba.
El proceso de compra, en su fase final, ha sido manejado directamente por el expresidente Uribe y el director de la ANT, Felipe Harman. Según fuentes cercanas, estas tierras serán entregadas a 30 familias campesinas de la región para el desarrollo de proyectos productivos.
Este acuerdo representa un punto de inflexión en la polarizada política colombiana, dado que se trata de una transacción entre el gobierno del presidente Gustavo Petro y uno de sus principales opositores, Uribe.
En agosto de 2023, la ANT presentó la propuesta final a Agropecuaria El Ubérrimo S.A.S., empresa cuyo representante legal es Tomás Uribe. La oferta surgió como respuesta a una iniciativa previa de la familia Uribe Vélez.
La firma DCI Colombia S.A.S. realizó un avalúo comercial de las tierras, fijando un valor de 3.031 millones de pesos. El pago se efectuará en dos partes: el 50 % al momento de firmar la escritura pública y el restante cuando se expida la copia auténtica de la escritura.
El año pasado, Uribe expresó en redes sociales su disposición para vender parte de la finca al gobierno. “El predio ofrecido tiene aproximadamente 192 hectáreas de alta productividad sostenible, aptas tanto para la ganadería empresarial como campesina”, señaló. Además, indicó que la oferta se hizo a un precio inferior al avalúo catastral de la región y solicitó revisar los valores de los avalúo para garantizar la continuidad de la actividad ganadera en la zona.
Desde el inicio del gobierno Petro, la ANT y la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegan) acordaron un plan de compra de tierras para la reforma agraria. La transacción con los Uribe es parte de este proceso, aunque el avance ha sido más lento de lo proyectado. Según la Contraloría General de la República, hasta noviembre de 2023 solo se habían adquirido unas 800 hectáreas, a pesar de que la meta inicial era de 3 millones.
Uno de los efectos de este diálogo entre el gobierno y el sector ganadero fue la incorporación de José Félix Lafaurie, presidente de Fedegan, al equipo negociador con el ELN, un hecho que marcó un acercamiento inédito entre Petro y un sector con el que ha tenido fuertes diferencias.
Hasta la fecha, el gobierno ha adquirido 448 mil hectáreas para la reforma agraria, de las cuales 186 mil corresponden al 2024. Estas tierras han sido destinadas a comunidades campesinas, afrodescendientes e indígenas, en cumplimiento del Acuerdo de Paz firmado con las extintas FARC en 2016. Además, se han formalizado 1,2 millones de hectáreas, consolidando un proceso clave en la política agraria del país.