El Gobierno del presidente Gustavo Petro y el Congreso de Colombia concluyeron un capítulo intenso de debates legislativos tras el hundimiento de la reforma tributaria, un hecho que marca el cierre de varias de las banderas políticas del año y empuja a ambos poderes a trazar nuevas agendas rumbo a las elecciones de 2026.
Con poco más de 30 sesiones ordinarias y 80 días hábiles restantes antes de la renovación del Congreso programada para el 8 de marzo de 2026, legisladores de diversas bancadas coinciden en que la última gran reforma propuesta por el Ejecutivo no logró avanzar en las comisiones económicas del Capitolio, obligando a replantear prioridades en salud, seguridad, economía y otros temas clave.
Dificultades Legislativas para Petro
El rechazo de la reforma tributaria —diseñada para recaudar recursos adicionales para el Presupuesto General de la Nación de 2026— representa uno de los golpes más significativos al plan del Gobierno en este periodo legislativo. La decisión de archivar la iniciativa en la Comisión Cuarta del Senado dejó un vacío fiscal considerable y abre interrogantes sobre cómo se financiarán programas sociales e inversión pública el próximo año.
Analistas advierten que, aunque la medida evita la creación de nuevos impuestos para hogares y empresas, ello no elimina el desafío de cubrir un déficit importante sin afectar servicios esenciales.
Rumbo a 2026: Nueva Etapa Política
La dinámica entre Ejecutivo y Legislativo ya se proyecta con la mira puesta en las elecciones legislativas y presidenciales del próximo año, con debates que incluirán el financiamiento de la salud, seguridad ciudadana y proyectos de inversión económica. La atmósfera política apunta a que temas como la ley de financiamiento, la creación de nuevos ministerios o reformas parciales serán parte de la discusión antes de que se instauren los nuevos congresistas.