El presidente Gustavo Petro ordenó la elaboración de un documento CONPES con el objetivo de fortalecer la defensa nacional y ajustar la estrategia del Estado frente al terrorismo ejercido por grupos armados ilegales. La decisión se anunció al término de un Consejo de Seguridad realizado en la Casa de Nariño y liderado directamente por el mandatario, según informó el ministro de Defensa, Iván Velásquez.
El plan contempla una inversión estimada en 49 billones de pesos, con un horizonte de ejecución de diez años, y busca robustecer de manera integral las capacidades militares, tecnológicas y operativas de la Fuerza Pública. Desde el Gobierno se explicó que esta inversión responde a una prioridad central de la actual administración: la protección de la vida como eje fundamental de la seguridad nacional.
El ministro Velásquez señaló que el fortalecimiento de la defensa es parte de una iniciativa estratégica del Gobierno para garantizar mejores condiciones de seguridad, lo cual, a su vez, permitiría generar mayor inversión, desarrollo económico y prosperidad en el país. En ese sentido, recalcó que la seguridad es un requisito indispensable para el crecimiento y la estabilidad social.
Por su parte, el ministro Pedro Arnulfo Sánchez destacó que los recursos necesarios para financiar este CONPES deberán provenir del esfuerzo colectivo de los colombianos. En sus declaraciones enfatizó que invertir en defensa y seguridad es una condición necesaria para alcanzar la paz, advirtiendo que los costos de no hacerlo serían mucho mayores. Según el funcionario, la falta de una defensa sólida termina generando impactos negativos más graves en términos humanos, económicos y sociales.
En paralelo, el Gobierno ordenó un rediseño de la estrategia contra las organizaciones criminales, con ajustes específicos en las operaciones ofensivas y de inteligencia. Esta decisión se produce tras recientes ataques terroristas atribuidos a disidencias lideradas por ‘Iván Mordisco’ en el Cauca y al ELN en el departamento del Cesar. El presidente dio instrucciones claras para fortalecer las capacidades de la Fuerza Pública, especialmente en el uso de tecnología y en la mejora de los sistemas de inteligencia.
La cúpula militar y policial será la encargada de analizar, diseñar e implementar la nueva estrategia de seguridad, con el objetivo de anticiparse a los ataques y responder de manera más eficaz a las amenazas. Desde el Ejecutivo se reiteró que el terrorismo no distingue víctimas y representa una amenaza directa para toda la población colombiana, por lo que se hizo un llamado a la ciudadanía a colaborar con las autoridades suministrando información que ayude a prevenir atentados.
Como parte de las medidas concretas, el comandante del Ejército Nacional, general Luis Emilio Cardozo, anunció la adquisición de sistemas antidrones y el fortalecimiento de la inteligencia militar. Esta decisión responde al uso creciente de drones por parte de grupos armados ilegales en ataques contra la Fuerza Pública y la población civil, especialmente en regiones como el Cauca, Arauca, Catatumbo y el Sur de Bolívar.
Finalmente, el general Cardozo subrayó la necesidad de revisar y reestructurar los planes de seguridad existentes, destacando que cada ataque representa una lección que obliga a tomar acciones inmediatas. El enfoque del nuevo plan será preventivo, buscando anticiparse a las amenazas y reducir la capacidad operativa de las organizaciones terroristas en el territorio nacional.

