A los 1.103 alcaldes municipales como a los 32 de gobernadores de los departamentos se les agota el tiempo para mostrar resultados. En 3 meses llegarán al 50% de sus mandatos y a partir de enero empezarán a sentir el sol a sus espaldas.
Hoy, más del 40% de los colombianos viven en la pobreza, sin que veamos una luz que indique que pronto vamos a salir de ella. Lo anterior, como consecuencia directa de la pandemia y del paro nacional que no termina. Sin embargo, ya va siendo tiempo para que empiecen a mostrar resultados.
Para nadie es un secreto que junto con el desempleo y la pobreza se ha aumentado de manera desproporcionada, la violencia y la inseguridad en todos los estratos de nuestra sociedad. Hoy nadie está a salvo de perder su celular, de un atraco o robo en cualquier esquina, restaurante, centro comercial o tienda, por parte de delincuentes que por necesidad o costumbre convirtieron esta mala práctica en su forma de vida a costa de la tranquilidad de los demás.
Al presidente, como a los actuales alcaldes o gobernadores les tocó bailar con la más fea. Hoy cuando la pandemia de una u otra forma ya está siendo dominada por la ciencia, les corresponde revisar sus planes de desarrollo para ponerse al día con sus promesas de campaña.
A los gobernantes se les agota el tiempo para mostrar resultados. Lo que lograron en materia de salud para controlar la pandemia en sus territorios está bien. Sin embargo, lo que hoy se impone es centrar su atención en la formulación y ejecución de proyectos que permitan generar empleo de calidad, ingresos y mejoren la seguridad.
La agudización del desempleo, la pobreza y la inseguridad no pueden ser las improntas que identifiquen sus gobiernos.
Echarle la culpa a la pandemia como al paro, para no mostrar resultados, es una pésima excusa para no trabajar y responder a las comunidades que con entusiasmo y llenos de ilusiones los respaldaron.
POR: VICTOR RIVAS MARTINEZ.

