En una decisión polémica, el Gobierno del presidente Gustavo Petro dio luz verde para la reapertura de mataderos municipales en ciertos lugares del país. Sin embargo, los frigoríficos critican esta medida fuertemente, ya que el gremio destaca preocupaciones sobre la salud pública y el impacto económico.
Según Álvaro Urruea, presidente ejecutivo de la Asociación Frigoríficos de Colombia (Asofrico), la medida carece de un fundamento sólido y no tiene en cuenta los riesgos para la salud pública. «No hay un fundamento sólido para que se tome una medida tan compleja. Aquí están en juego muchas cosas. Cuando se toma una decisión de estas, que es de nivel nacional, tienes que garantizar la salubridad y en eso los frigoríficos han hecho grandes inversiones», declaró Urruea a Semana.
Aunque el Gobierno argumenta que la reapertura de estos mataderos permitirá ofrecer carne más barata en municipios de quinta y sexta categoría, Urruea desestima el impacto significativo en el precio. «No supera el 2 o 3 por ciento el beneficio nacional. También se dice que abaratará los precios porque se ahorran el transporte de la carne, pero es que ítem no supera el 3 por ciento del valor total. Es decir, no va a impactar en nada el precio nacional de la carne», afirmó Urruea en declaraciones a medios radiales.
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Frigoríficos critican que la decisión provocará riesgos para la salud
El presidente de Asofrico destacó no solo el riesgo para la salud pública, sino también preocupaciones ambientales asociadas con la reapertura de estos mataderos. De esta manera, los frigoríficos critican que habrá una posible afectación en esta área.
Por su parte, Urruea señaló que, recordando cómo funcionaban hace años, no hay garantía de mejoras. «La inocuidad del producto, que afecta la salud pública de los colombianos; el tema ambiental, porque la mayoría de esos mataderos no cumplen con las normas ambientales», expresó Urruea.
Urruea también enfatizó la importancia de condiciones óptimas para garantizar la seguridad alimentaria en mataderos municipales. Señaló que deben cumplir con ciertos requisitos, incluyendo el respeto al Plan de Ordenamiento Territorial (POT) de cada municipio. Además, destacó deficiencias en la construcción de estos lugares, afirmando que «los mataderos municipales los techos están rotos, tienen huecos por todas partes.»
En medio de este debate, la reapertura de mataderos municipales en Colombia plantea interrogantes sobre la seguridad, la economía y el impacto real en el precio de la carne para los consumidores.