Las exportaciones de vehículos británicos a Estados Unidos se redujeron a la mitad en mayo tras la imposición de un arancel del 25 %. Esto ha propiciado una caída del 32,8 % en la producción automotriz del Reino Unido, la más baja desde 1949.
Aun así, hay señales positivas: EE. UU. eliminó algunos «aranceles de represalia» de la era Trump, y se han firmado nuevos acuerdos para agilizar el envío de tierras raras desde China, con la Casa Blanca reportando estar cerca de concretar diez acuerdos comerciales más. Los mercados globales reaccionaron con optimismo, impulsando a los índices de Europa y Asia-Pacífico
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