La comunidad de Puerto Asís se encuentra consternada por la trágica muerte de Dana Valentina García Gasca, una joven de 14 años que había estado luchando contra el consumo de sustancias psicoactivas (SPA). Dana falleció dejando un vacío profundo en su familia y en quienes la conocían como una persona llena de sueños y esperanza.
Dana, quien había iniciado un proceso de rehabilitación para superar su adicción y soñaba con un futuro en el que pudiera convertirse en peluquera, fue recordada por su entusiasmo y su deseo de superación. “Le habían regalado una máquina de cortar pelo y estaba buscando oportunidades para estudiar peluquería”, compartió una persona cercana a la familia, quien recordó cómo la joven había mostrado interés por aprender y mejorar su vida, a pesar de las dificultades que enfrentaba.
Bienestar emocional
Sin embargo, la influencia de las sustancias psicoactivas, un factor que afectó gravemente su bienestar emocional y físico, parece haber sido determinante en la trágica decisión que la joven tomó en medio de su lucha. La familia y amigos de Dana destacaron que, en las últimas semanas, la adolescente había mostrado signos de esperanza y hablaba con ilusión de sus proyectos y metas, lo que hace aún más doloroso comprender lo sucedido.
La familia García Gasca, sumida en el dolor por la pérdida de su hija y en una difícil situación económica, enfrenta ahora un nuevo reto: cubrir los gastos del sepelio. “Estamos supermal económicamente y pedimos la colaboración de la gente para poder sepultarla”, expresaron los familiares, quienes buscan la solidaridad de la comunidad para poder darle a Dana un digno adiós.
Prevención
El caso de Dana Valentina ha puesto sobre la mesa la necesidad urgente de fortalecer los programas de prevención y apoyo a jóvenes en riesgo, especialmente en regiones donde el consumo de sustancias psicoactivas es un problema complejo y creciente. Las autoridades y organizaciones sociales han destacado la importancia de brindar acompañamiento emocional y opciones de rehabilitación efectivas para evitar tragedias como la vivida por esta familia.
Este triste suceso también resalta la importancia de la solidaridad comunitaria en momentos de crisis. La familia de Dana, que enfrenta no solo el dolor de la pérdida sino también la falta de recursos, ha hecho un llamado a la generosidad de quienes puedan contribuir para cubrir los gastos funerarios y darle el último adiós a la joven, cuyo futuro se vio truncado a tan temprana edad. La comunidad de Puerto Asís, en su conjunto, lamenta la pérdida de una joven que, aunque marcada por las dificultades, soñaba con un mejor mañana. Hoy, todos los esfuerzos se centran en apoyar a su familia para que puedan despedirla de manera digna, mientras se reflexiona sobre los retos que enfrenta la juventud en el país en cuanto a la prevención del consumo de sustancias psicoactivas.