Ingredientes
- 1 lechuga fresca (crespa, romana o la que prefieras), bien lavada
- 2 tomates maduros picados en cubos o rodajas
- 1 pepino en rodajas finas
- 2 cucharadas de <u>aceite de oliva</u>
- 1 cucharada de <u>jugo de limón</u> o vinagre
- Sal al gusto
- Pimienta negra al gusto
- (Opcionales) Aguacate, cebolla morada, semillas de girasol, nueces o crutones
Preparación
Para preparar una ensalada verde verdaderamente fresca y equilibrada, es fundamental comenzar con una buena selección de ingredientes. El punto más importante de esta receta es utilizar un <u>aceite de oliva de excelente calidad</u>, ya que este será el encargado de realzar los sabores y aportar suavidad a la mezcla.
Inicia lavando cuidadosamente todas las hojas de lechuga. Retira cualquier rastro de tierra y procura secarlas muy bien, ya sea con un paño limpio o un centrifugador. Este paso es crucial porque unas hojas húmedas impiden que el aderezo se adhiera adecuadamente, lo que afecta el sabor final.
Una vez secas, corta las hojas en trozos grandes y colócalas en un bowl amplio. Añade los tomates picados, que aportarán jugosidad y un sabor ligeramente dulce. Incorpora también el pepino en rodajas finas, un ingrediente que da frescura y un toque crujiente indispensable en esta preparación.
Sazona con una pizca de sal y un toque de pimienta negra. Luego vierte las dos cucharadas de <u>aceite de oliva</u> y completa el aderezo con una cucharada de <u>jugo de limón</u> o vinagre. Mezcla con movimientos envolventes para no maltratar las hojas.