El líder social, edil y delegado de la JAC de la Comuna Cuatro del municipio de Tumaco, Leder Rodríguez, manifestó su preocupación y angustia por la falta de garantías de cara a las elecciones; los hechos violentos y hostigamientos reiterativos que se vienen presentando en el territorio, tienen en zozobra y en jaque a los líderes sociales de los municipios de la Costa Pacífica nariñense y del Pie de Monte.
El tumaqueño y defensor de las causas sociales, fue enfático en denunciar que las amenazas y los asesinatos son objeto de represaría por parte de los grupos armados ilegales que frecuentan el territorio, quienes están atemorizando a la población civil. Exigió, que los operativos de control en el casco urbano y en la zona rural deben fortalecerse para salvaguardar la vida e integridad de las personas que viven en la región.
Confinamiento
“La situación que afrontamos es precaria porque estamos afrontando el confinamiento a causa de los grupos al margen de la ley; ellos están ahí, no dicen nada cuando tienen que salir a matar a un líder social, no le advierten, sino que cometen su accionar sin medir palabras y sin remordimiento. Muchos líderes no se pueden expresar por temor y miedo, el panorama que se afronta es desalentador”, precisó Rodríguez.
A su vez, manifestó que “no tenemos garantías para poder acceder a ciertas corporaciones públicas, los partidos políticos no fueron capaces de generar los avales que se necesita para que los líderes sociales puedan postular su nombre para los cargos de ediles, concejales o diputados. EL Gobierno Nacional y Departamental no brindan el acompañamiento que se necesita para mitigar esta problemática”.
Situación compleja
“Para los líderes de la zona rural es la situación más compleja, ellos no tienen garantías ni para movilizarse. Los grupos armados siguen ejerciendo su poder a través de las amenazas, chantajes y extorsiones, además están sacando a las familias de sus casas, lo que viene sucediendo en nuestra localidad no se denuncia por ciertas razones”, resaltó el delegado de la JAC.
La preocupación que existe en el municipio también se debe a que las autoridades competentes no están emprendiendo acciones drásticas para garantizar la sana convivencia, y lograr el control del orden público. Se hizo el llamado a las organizaciones criminales, al respeto por los Derechos Humanos, a empezar a generar escenarios de paz.

