Una mezcla de indignación y tristeza embarga a los habitantes del corregimiento de San Fernando, ubicado en la zona rural de la ciudad de Pasto, tras los hechos ocurridos durante la pasada Semana Santa. Lo que debía ser un tiempo de reflexión y respeto por la naturaleza se convirtió, según los residentes, en un lamentable episodio de contaminación y falta de conciencia ambiental.
Durante esta temporada, decenas de caminantes y turistas llegaron hasta este emblemático lugar para visitar la tradicional cruz y disfrutar de sus paisajes naturales. Sin embargo, al final de la jornada, lo que quedó fue un panorama desolador: caminos repletos de basura, envases plásticos, botellas, empaques de comida y residuos varios esparcidos por la zona.
Molestia
La comunidad local ha alzado su voz para denunciar este comportamiento irresponsable, que afecta directamente el ecosistema del corregimiento y vulnera el esfuerzo de los habitantes por preservar su entorno. Gabriela Pantoja, reconocida líder de la zona, expresó su molestia y preocupación ante esta situación:
“Esto no se puede volver a repetir. La gente vino, caminó, disfrutó del paisaje, pero dejó una huella muy negativa. Tiraron basura por montones, sin pensar en el daño que estaban causando. Las personas que hacen esto merecen ser sancionadas, porque la naturaleza no puede seguir pagando las consecuencias del irrespeto”, afirmó.
Pantoja también hizo un llamado urgente a las autoridades municipales para que se implementen medidas de control más estrictas, se realicen campañas de educación ambiental, y se establezcan sanciones claras para quienes afecten los espacios naturales del corregimiento.
Limpieza
Los habitantes de San Fernando, que han trabajado durante años por mantener la limpieza y el orden en su territorio, consideran que este tipo de situaciones no solo afectan al medioambiente, sino también a la imagen turística del lugar y a la convivencia entre visitantes y residentes. “Nos duele ver cómo lo que con tanto esfuerzo cuidamos es destruido en unos pocos días. No estamos en contra de que la gente venga, pero deben hacerlo con respeto”, concluyó otro residente que participó en las labores de limpieza tras el paso de los visitantes.