En el municipio de Samaniego, crece la incertidumbre por los escenarios violentos que se han estado presentando en el territorio en cuestión de orden público y desplazamientos, grupos al margen de la ley han obligado a familias a salir de sus territorios, quienes por temor y zozobra han tenido que abandonar el lugar que los vio crecer.
Durante estos meses las autoridades han venido realizando las gestiones para que la población rural que estaba asentada en el casco urbano del municipio, pueda retornar a sus lugares de origen, sin embargo, la tarea, de acuerdo a los entes gubernamentales, no ha sido fácil.
El alcalde municipal, Oscar Pantoja Morales, sobre la actual situación que se presenta en su región explicó que “se ha buscado brindar las ayudas a la población, inicialmente cerca de 7 mil personas eran las que estaban asentadas en el casco urbano”.
Garantías
El mandatario local señaló que, muchas familias han decido de manera voluntaria retornar a sus lugares como es el caso de la comunidad Awá y El Sande, de igual manera aún hay personas que no han logrado hacer el retorno porque no hay garantías para hacerlo.
De acuerdo con Pantoja, actualmente se está trabajando en un Comité de Justicia Transicional Ampliado para lograr otorgar ayudas de manera efectiva y contemplando las condiciones de cada uno de los ciudadanos que se han visto afectados por este flagelo.
Se estima que cerca de 2 mil personas se encuentran aun definiendo su situación, quienes no han podido regresar a sus hogares debido a la alta peligrosidad de las zonas y a la falta de condiciones para el retorno.
Se espera que estas comunidades puedan tener soluciones asertivas a corto plazo que les permita retomar sus actividades diarias, garantizando y priorizando sus derechos.