Delegaciones de Estados Unidos, Israel y el grupo islamista Hamás se reunieron este lunes 6 de octubre de 2025 en la ciudad turística egipcia de Sharm el-Sheikh, bajo la mediación de El Cairo, para avanzar en la implementación del plan de paz propuesto por Donald Trump que busca poner fin a la guerra en la Franja de Gaza.
El encuentro se desarrolla a pocos días del segundo aniversario del ataque del 7 de octubre de 2023 —que desató el conflicto actual— y tiene como objetivo lograr un alto el fuego, la liberación de rehenes y el inicio de un proceso político que lleve al reconocimiento del Estado palestino.
El plan de Trump ha recibido respuestas positivas tanto de Israel como de Hamás, aunque aún quedan por resolver varios detalles técnicos y políticos. En nombre del Gobierno estadounidense, el enviado especial Steve Witkoff y Jared Kushner, yerno de Trump, encabezan la delegación norteamericana. Por parte de Hamás, participa Khalil al-Hayya, su jefe negociador, mientras que la delegación israelí viaja este mismo lunes para unirse a las conversaciones.
El presidente de Egipto, Abdel Fattah al-Sisi, elogió públicamente la iniciativa de Trump, calificándola como un paso en la dirección correcta hacia una paz duradera. Según al-Sisi, el alto el fuego, la liberación de prisioneros, la reconstrucción de Gaza y la creación de un Estado palestino reconocido internacionalmente son señales de que “estamos en el camino correcto hacia la estabilidad regional”.
El presidente estadounidense Donald Trump pidió a las partes que “se muevan rápido” para concretar el acuerdo, asegurando que las conversaciones “avanzan rápidamente” y que la primera fase del plan debería completarse esta misma semana. Esta fase incluye el intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos, un paso considerado fundamental para destrabar el diálogo.
De acuerdo con el plan, Israel liberaría 250 prisioneros con cadena perpetua y más de 1.700 detenidos de Gaza, mientras que Hamás devolvería a todos los rehenes, vivos o muertos, en un plazo de 72 horas
La propuesta también establece que Hamás no tendrá ningún papel político en el futuro gobierno de Gaza, el cual sería administrado por un órgano tecnocrático de transición bajo supervisión internacional. Este organismo estaría encabezado por Donald Trump e incluiría al ex primer ministro británico Tony Blair, con el fin de garantizar la estabilidad y la reconstrucción del territorio.
Mientras tanto, el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, pidió a Israel detener los bombardeos antes de las conversaciones, recordando que “no se pueden liberar rehenes en medio de ataques”. La comunidad internacional, incluidos varios ministros de Exteriores, ha calificado las negociaciones como una “oportunidad real” para alcanzar un alto el fuego sostenible tras meses de mediación estancada.
En este contexto, Egipto reafirma su papel como mediador clave en el conflicto, apostando por un proceso de paz que no solo frene la violencia, sino que siente las bases para una reconstrucción duradera y un futuro político estable para Gaza.