Ismael Botina popular maestro Buchón, pocas veces en su vida ha sido testigo de cómo un alcalde se desfaja la correa y llega a dar perrero a unos funcionarios holgazanes, desobedientes y muérganos, que lo hacen quedar mal por corruptos.
La historia comenzó así: un día cualquiera, cuando el alcalde de Pasto Nicolas Toro, caminaba por la calle, lo abordó una señora, le llamó la atención, y le dijo…oiga señor Toro, porque es que en su gobierno están cobrando peajes para subir o bajar los puntajes del Sisbén?. Nicolás, no tenía ni las mínima idea de lo hablaba la ciudadana, y llamó a la quejosa que le explicara con más detalles lo sucedido.
Doña “Margarita”, le mostró con pelos y señales, que llegaron los funcionarios del Sisbén hasta su casa, la encuestaron, y luego la llamaron advertirle, que para incluirla en el listado de los beneficiarios, bebía de pagarles una cuota de trescientos mil pesos. El alcalde Nicolas, movía la cabeza y le parecía algo increíble.
En efecto, doña “Margarita”, por ser una mujer pobre de estrato cero, debía de aparecer en el listado de los beneficiados, pero, como no pudo pagarles esa cuotica de los trescientos mil, los funcionarios municipales la borraron de la lista.
Estas pruebas las llevó el alcalde como denuncia ante la Fiscalía General de la Nación, para la respectiva averiguación y paso seguido, para darles un escarmiento, llegó Nicolas y delante de toda la gente que estaba haciendo fila, regañó a los badulaques de la oficina del Sisbén.
“En mi administración, no permitiré que se cometan abusos con la gente humilde, y cerraré todas las hendijas de la corrupción”. Los funcionarios municipales, quedaron notificados, como perros regañados, con una denuncia penal en su contra. La única solución para combatir la corrupción, tiene ese camino: primero recoger las pruebas, denunciar y luego regañarlos por badulaques y facinerosos.
Pueda que para mucha gente, pagar un soborno de trescientos mil, no sea significativo, sin embargo hay casos de casos en donde la situación es tan angustiosa que es todo el único ingreso del mes.
El asunto va más allá, los rumores y denuncias de la gente, comenzaron a salir a flote y le llegan a oídos del alcalde Nicolas secretos a voces; por eso encontramos que entre los beneficiarios de los subsidios del gobierno aparece gente con lujosos vehículos y residencias de altos barrios perfumados. Es decir, ni estan todos los que son, ni son todos los que están. Gentes con tracto mulas recibiendo subsidios, gracias al pago de sobornos, muchos ricos en la fila, perjudicando a gente que realmente lo necesita.
El alcalde anunció que irá hasta las últimas consecuencias sin importar caiga quien caiga, dentro de esta cruzada contra la corrupción.
Este regaño del siglo, es una campanada de alerta al resto de los funcionarios de la alcaldia de Pasto que lleva un claro mensaje: cero corrupciones.
¡Qué dificil gobernar!
SISBÉN: Sistema de Identificación de Potenciales Beneficiarios de Programas Sociales