En Santander se registran cuatro bloqueos que afectan, entre otras, el tránsito entre Bucaramanga y Cúcuta.
Los manifestantes, que demandan atención a sus necesidades y derechos, han bloqueado vías y rutas estratégicas, lo que ha complicado el transporte de mercancías y el desplazamiento de personas.
Este tipo de movilizaciones suelen surgir por problemas como la falta de apoyo gubernamental, condiciones laborales precarias y el acceso a servicios básicos. La situación podría tener un impacto significativo en la economía local y nacional, así como en la logística de suministro de productos en varias regiones.
Las autoridades tendrán que buscar soluciones para mediar en el conflicto y restablecer la movilidad, al tiempo que se atienden las demandas de los campesinos y mineros para evitar que la situación escale.
En el segundo día de los paros de campesinos y mineros, se han reportado serias afectaciones en la movilidad en seis departamentos: Norte de Santander, Santander, Boyacá, Antioquia, Caldas y Risaralda. Los manifestantes han bloqueado vías clave que conectan con el centro del país, lo que ha interrumpido el transporte de mercancías y el desplazamiento de personas.
Estas acciones reflejan la creciente insatisfacción con las condiciones laborales y la falta de atención a sus necesidades. La situación requiere atención inmediata por parte del gobierno para buscar un diálogo que permita resolver los conflictos y restablecer la normalidad en las vías. La continuidad de las protestas podría tener un impacto significativo en la economía y en la vida cotidiana de las comunidades afectadas.