El páramo de Bordoncillo, ubicado entre el sur de Nariño y la frontera natural con Putumayo, ha sido declarado una de las zonas más estratégicas para la conservación del agua y la biodiversidad. Este ecosistema, menos conocido que otros páramos del país, es clave para abastecer acueductos rurales y proteger especies en peligro.
En los últimos dos años, entidades ambientales han identificado más de 120 especies de flora paramuna, entre ellas frailejones, chuquiraguas y pajonales que actúan como “esponjas” de agua. También se han registrado mamíferos como el zorro andino, venado soche y pequeños roedores endémicos.
La intervención incluye educación ambiental para veredas cercanas, cercados protectores de humedales, acuerdos de uso sostenible y una campaña para frenar el avance de la ganadería en zonas sensibles.

