Hernán Insuasti Gonzales (Acord)

El orgullo nariñense

Por: Hernán Insuasti Gonzales (Acord)

Ya palpitamos los cuadrangulares semifinales de la Liga II-2024 del fútbol colombiano. Para orgullo de los nariñenses allí está Deportivo Pasto, el cual con muchos méritos logró el objetivo de clasificar.

Nuestro equipo está junto a los históricos y de gorda chequera como Millonarios, Atlético Nacional, América, Junior y Santa Fe, así como al lado de los nuevos grandes del balompié como Once Caldas y Deportes Tolima. Es más, se quedaron por fuera Medellín que tiene una de las mejores nóminas del país, así como Deportivo Cali que es uno de los grandes, como también el vigente campeón Atlético Bucaramanga y Deportivo Pereira que contrataron a entrenadores de peso que no cualquier club los puede tener. Águilas Doradas y Equidad Seguros que cuentan con una comodidad económica también están afuera de la fiesta final.

En el Pasto se trabaja el doble, el triple o más para lograr las metas. Las dificultades económicas impiden hacer importantes contrataciones, por eso, al técnico de turno le toca potenciar a los jugadores que tiene para sacar de ellos su mejor expresión. Daniel Moreno y Cristian Arrieta son dos ejemplos. Ante la necesidad, a ellos se los ubicó en posiciones que antes no manejaban y ahora son de los mejores futbolistas que existen en la Liga.

Moreno era un extremo sin gol, eso fue lo que observamos en Junior, Deportes Tolima y Alianza Petrolera. El año anterior en Pasto comenzó a mostrar sus virtudes como delantero, pero después de regresar de Santa Fe para este segundo semestre, el técnico Gustavo Florentín lo ubicó de delantero definido en donde se destapó como goleador.

A Cristian Arrieta el técnico René Rosero lo ubicó el primer semestre de medio centro y Florentín lo consolidó en ese puesto. Es decir, en este jugador y en Moreno miramos una transformación, gracias al trabajo de los entrenadores y a su misma intensión de crecer.

Soy consciente que en el aspecto dirigencial hay muchas cosas por corregir, sin embargo, el simple hecho de estar al frente de un club profesional no es fácil. Ponerle el pecho a la brisa en momentos críticos como lo fue en la pandemia, es algo que no se puede dejar pasar por alto y por eso valoro lo del presidente Oscar Casabón. Hay gente que tira piedras desde afuera y muchos desde los medios de comunicación destacan eso, pero lo más difícil es estar adentro lidiando con deudas y muchas dificultades.