Un grupo de docentes de los colegios oficiales de Pasto adelantaron un plantón frente a la Secretaría de Educación Municipal, denunciando incumplimientos en el pago de sus salarios y retroactivos.
La manifestación se convirtió en un espacio de reclamo y exigencia hacia las autoridades locales, en busca de respuestas claras y soluciones inmediatas.
De acuerdo con los maestros, la situación ha generado un retraso económico que afecta a más de mil familias en la ciudad, puesto que los dineros pendientes corresponden a ajustes salariales que debieron ser cancelados desde enero.
La demora en los pagos ha llevado a los educadores a expresar públicamente su inconformidad y a exigir el respeto por los acuerdos firmados meses atrás.
Reuniones
El presidente del Sindicato del Magisterio de Nariño, Gerardo Coral, afirmó que, a pesar de las reuniones sostenidas con funcionarios de la Secretaría de Educación, no se ha establecido una fecha exacta de pago.
“Dentro de los pliegos y los acuerdos se encuentra el pago oportuno de salario y los ajustes que haya, lo que se está incumpliendo. Estuvimos dialogando con los funcionarios y no nos dieron una fecha clara de pago”, señaló Coral.
Según dijo, la nómina fue remitida a la Secretaría de Hacienda, pero posteriormente se argumentó que existían inconsistencias en los documentos.
“La plata de ese ajuste está girada hace dos meses y medio, y el plazo que les dieron para pagar era hasta el 5 de agosto. En nuestro caso, la fecha límite que nos habían dado era hasta el 15 de agosto”, agregó Coral.
Situación
Los retrasos en el pago, que corresponden a retroactivos desde comienzos del año, representan un duro golpe para el magisterio.
Muchos docentes señalaron que esta situación ha puesto en riesgo el cumplimiento de obligaciones financieras y personales, generando un panorama de incertidumbre.
La protesta contó con la presencia de cientos de maestros y maestras, quienes con pancartas y arengas pidieron a las autoridades municipales dar celeridad a este proceso.
El plantón se desarrolló de manera pacífica, aunque los participantes advirtieron que insistirán en este tipo de acciones hasta que se respeten los acuerdos pactados.
Respaldo
De momento, no se ha planteado la suspensión de clases, sin embargo, la situación genera preocupación en la comunidad educativa por las posibles repercusiones que podrían tener los atrasos prolongados.
Padres de familia y estudiantes han manifestado su respaldo a los docentes, reconociendo que su labor merece dignidad y condiciones justas.
Los maestros recalcaron que la docencia es una tarea que exige esfuerzo, compromiso y dedicación.
No obstante, insistieron en que el Estado y las entidades responsables deben cumplir con las obligaciones adquiridas, garantizando estabilidad laboral y económica a quienes forman las nuevas generaciones.
Hasta ahora, las autoridades locales no han emitido un pronunciamiento oficial que detalle las razones del incumplimiento ni los plazos para resolver la situación.
Mientras tanto, el magisterio nariñense permanece en alerta y preparado para continuar movilizándose.
La expectativa se centra en que, en los próximos días, se logre una concertación efectiva que permita saldar las deudas y evitar que la situación escale a mayores conflictos laborales.