Ecuador se convierte en el centro del resurgimiento del tráfico de la cocaína en América Latina

Un fenómeno regional que estalla en Ecuador

El primer impacto de el resurgimiento del tráfico de la cocaína en América Latina se siente con fuerza en Ecuador. Aunque no produce la droga, su ubicación y sus puertos lo convirtieron en el nuevo epicentro del contrabando hacia Estados Unidos y Europa.

Los carteles mexicanos, grupos guerrilleros colombianos, mafias europeas y bandas locales formaron alianzas que operan desde los puertos ecuatorianos. Esta red internacional casi tomó el control del país en 2022 y 2023.

Funcionarios y analistas coinciden en que el resurgimiento de estas redes se debe, en parte, al cambio de prioridades de Estados Unidos, que enfocó sus recursos en combatir el fentanilo y dejó un vacío en la lucha contra la cocaína.


Estados Unidos desplazó su enfoque y los carteles aprovecharon

Desde 2017, la política estadounidense se centró en frenar la expansión del fentanilo. Esta decisión redujo la presión sobre los grupos dedicados a la cocaína.

Los traficantes aprovecharon ese espacio para expandirse, sobre todo en Ecuador. El resultado fue un aumento dramático de homicidios, atentados y extorsiones que desbordaron a las autoridades ecuatorianas.

Coches bomba y enfrentamientos armados se hicieron comunes en zonas urbanas. Oficiales reportan que los grupos criminales reclutan a jóvenes pobres y operan con recursos que superan a los de las fuerzas del Estado.


Ecuador: de país estable a ‘superautopista de la cocaína’

Ecuador era considerado un país estable y alejado de los conflictos regionales. Pero esto cambió cuando, en 2009, cerró una base militar estadounidense. Eso debilitó la cooperación antidrogas y abrió espacio a nuevos actores ilícitos.

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Durante el gobierno de Trump, los carteles mexicanos consolidaron presencia en el país y formaron redes con bandas locales y mafias europeas. Funcionarios de Estados Unidos aseguran que hasta el 70 % de la cocaína global pasa hoy por Ecuador.


Una lucha desigual contra redes cada vez más poderosas

La Marina ecuatoriana lidera los operativos para frenar el contrabando. Sin embargo, oficiales reconocen que se enfrentan a grupos con armas, fondos y logística superiores.

La corrupción, las filtraciones y la falta de personal capacitado complican las operaciones. Pese al apoyo militar de Estados Unidos, Ecuador sigue en una lucha crítica para recuperar el control.

Diplomáticos advierten que esta es una guerra existencial y que la región necesita cooperación urgente para contener el resurgimiento del tráfico de la cocaína en América Latina.