Situado en el corazón de la exuberante vegetación que rodea el municipio de Carmen de Carupa, el parque se encuentra al norte de Cundinamarca, a aproximadamente 130 kilómetros de Bogotá. Este acceso relativamente cercano lo convierte en un destino ideal para escapadas de fin de semana. Los visitantes pueden disfrutar de diversas actividades al aire libre, como caminatas, senderismo y picnics en sus áreas designadas, rodeados de un entorno natural impresionante. El sonido de la fauna local y el murmullo del agua del embalse crean una atmósfera serena que permite a los visitantes relajarse y recargar energías.
Según la información proporcionada por la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), el parque no solo es un espacio recreativo, sino que también juega un papel crucial en la gestión de recursos hídricos de la región. Está diseñado para almacenar el caudal del río Hato, garantizando el abastecimiento de agua para los municipios de Carmen de Carupa y la Villa de San Diego de Ubaté. Este aspecto ecológico resalta la importancia del parque en la conservación del medio ambiente y la sostenibilidad de los recursos naturales, al mismo tiempo que proporciona un espacio de disfrute y esparcimiento para la comunidad.
Además de su valor recreativo y ecológico, el Parque Forestal Embalse El Hato se convierte en un punto de encuentro para la cultura local. A menudo, se organizan actividades y eventos que celebran la riqueza cultural de la región, permitiendo a los visitantes sumergirse en las tradiciones y costumbres de los habitantes locales. Esto, junto con sus espectaculares vistas y su ambiente relajante, hacen del Parque Forestal Embalse El Hato un destino imperdible para quienes buscan una experiencia completa que combine naturaleza, cultura y bienestar.