Durante el desarrollo del sexto ciclo de negociaciones de paz entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), surgieron tensiones sobre la prolongación del cese al fuego bilateral. El 24 de enero de 2024, el alto comisionado de Paz, Otty Patiño, anunció un supuesto acuerdo para extender la pausa en las hostilidades, sin embargo, el comandante del ELN, alias Antonio García, desmintió dicha afirmación.
En declaraciones contundentes, García rechazó las palabras de Patiño, cuestionando la veracidad de sus afirmaciones: «Otty Patiño ha dicho que ya se prorrogó el cese al fuego entre el ELN y las Fuerzas Militares y de Policía. ¿De dónde sacará esos inventos? (sic)». Estas declaraciones sugieren una discrepancia importante entre las partes en la mesa de negociaciones, generando incertidumbre sobre el futuro del cese al fuego.
El anuncio de Patiño se había realizado con optimismo, destacando un aparente cons enso en torno a la continuidad de la pausa en las acciones bélicas. Sin embargo, las palabras de García ponen en duda la veracidad de esos avances y subrayan la complejidad de las conversaciones de paz.
El sexto ciclo de negociaciones representa un esfuerzo continuo para buscar soluciones y acuerdos entre el Gobierno y el ELN, pero las tensiones evidenciadas en torno al cese al fuego plantean interrogantes sobre la capacidad de ambas partes para llegar a un entendimiento sólido. La comunidad internacional observa de cerca estos desarrollos, ya que la estabilidad en Colombia depende en gran medida de la resolución pacífica de los conflictos armados.