En un acto de resistencia y rechazo a lo que consideran una injerencia judicial en sus asuntos internos, comunidades indígenas de la Organización de Resguardos Indígenas del Pacífico (Oripa) se tomaron en las últimas horas la entrada del Palacio de Justicia del Distrito Especial de Tumaco, para protestar contra una decisión de un juez que, según ellos, vulnera su autonomía territorial.
El conflicto surgió a raíz de una orden emitida por un juez, quien destituyó a la gobernadora del Resguardo Pungan de Campo Alegre, Gisella García, y designó a una nueva persona para ocupar el puesto.
Procesos
Esta decisión fue tomada sin el consenso de la comunidad y generó una fuerte reacción en los nueve resguardos asociados a la Oripa, quienes consideran que la intervención judicial en sus procesos internos es una violación de sus derechos y de su autonomía, reconocida por la Constitución colombiana.
La manifestación fue encabezada por el gobernador del Resguardo de Inguapi Palangana, Willian Ortiz, quien en declaraciones destacó que la protesta no solo responde a una preocupación puntual sobre el Resguardo de Pungan de Campo Alegre, sino también a un patrón de intervenciones judiciales que se está replicando en otros resguardos indígenas de la región.
Respuesta
“Se está obligando al señor alcalde a posicionar a una persona que no está reconocida por el Resguardo de Pungan de Campo Alegre. Este no es un caso aislado, ya que también está ocurriendo en otros resguardos”, afirmó Ortiz.
En su intervención, el gobernador exigió un diálogo con representantes de la Personería, la Defensoría del Pueblo y el Ministerio del Interior para aclarar la situación.
Una de las voces más afectadas por la situación fue la de la gobernadora destituida, Gisella García, quien se presentó en la protesta para expresar su desacuerdo con la decisión del juez y para exigir que se respeten sus derechos y los de su comunidad.
Imposición
García destacó que no está de acuerdo con la imposición de un nuevo liderazgo, especialmente cuando queda menos de un mes para que los actuales gobernadores entreguen su periodo de gestión.
“Nos están diciendo que debemos acatar una orden que no solo no reconoce nuestra autonomía, sino que también contraviene nuestras prácticas y costumbres. Estamos exigiendo que se nos respete como comunidad indígena, que se reconozcan nuestros derechos y que no se mezclen las leyes ordinarias con la legislación indígena”, declaró García.
El gobernador Willian Ortiz también expresó su preocupación por la creciente amenaza de grupos armados que, según él, han victimizado y perseguido a las comunidades indígenas en los últimos tiempos.