Estamos a menos de cinco meses para las elecciones al Senado y a la Cámara de Representantes que se llevarán a cabo el próximo mes de marzo de 2022, y la temporada de inscripciones y promesas de los candidatos ya va a empezar.
Por lo tanto, los partidos políticos ya empiezan a ‘calentar motores’ y preparar sus estrategias para captar el mayor número de electores que los lleven al poder.
Entre estas está lanzar un candidato que aparenta conocer todas las necesidades de la región que quiere representar y que sea carismático. Y si es bien parecido mejor.
Asimismo es importante que presente un programa de gobierno bien definido que le ‘garantice’ a la comunidad que va a gobernar con transparencia y sujeto a la ley.
Como ahora están en boga unos de los principales problemas que agobian al país, como la corrupción y la impunidad, en las campañas los políticos nos van a prometer acabar con estas, pero sin explicarnos muy bien cómo lo piensan hacer.
Nosotros como electores estamos a la expectativa del cambio que prometen cumplir los candidatos durante sus campañas.
Pero siempre sucede lo mismo. Nos dejamos comprar por un tamal, un puesto de trabajo, mercados y hasta electrodomésticos.
Uno de los sectores de la población apetecidos por los partidos políticos es el de los indecisos, o sea aquellas personas que por alguna u otra razón no tienen claro por quién van a votar.
Este representa, según las encuestas, el mayor porcentaje de los potenciales electores.
“He llegado a la conclusión de que la política es demasiado seria para dejarla en manos de los políticos”, dijo alguna vez Charles de Gaulle.
La mala fama de la política se debe a la corrupción y los abusos de los políticos que hacen de esta su negocio.
Dentro de pocas semanas, cuando comience la propaganda política electoral, las calles de la ciudad se llenarán de avisos invitando a votar por determinado candidato.
Asimismo, por los medios de comunicación y las redes sociales quienes aspiran a ocupar uno de esos cargos de elección popular tratarán de convencer al mayor número de personas para que voten por ellos.
Cada uno expondrá su programa bandera con el que intentará llegar al poder. Por ejemplo, unos dirán que trabajarán por la paz, otros por acabar con la corrupción, y hasta las más insólitas como donar el sueldo para los más necesitados.
Por: Edgar Enríquez.