Hace días atrás se realizó la cumbre COP26 en Glasgow, Escocia en donde diferentes presidentes a nivel mundial se dieron cita para hablar acerca de las estrategias de mitigación a la afectación que está sufriendo actualmente el medio ambiente.
En dicho encuentro fue risible ver como el actual presidente de Colombia habló acerca del cuidado y protección de la naturaleza cuando en la realidad en nuestro territorio pasa todo lo contrario expuesto en Glasgow.
En dicha cumbre Iván Duque posó de ambientalista y resaltó el compromiso del Gobierno Nacional para proteger los bosques y zonas ambientales del país. ¡Descarada mentira del mandatario nacional! Hemos visto cómo en Colombia, Duque y su grupo político, ha dado luz verde al fracking para así extraer recursos minerales de la naturaleza sin importar el daño que se cause a esta misma; hemos sido testigos de cómo se ha tratado de meter a la fuerza el glifosato en las diferentes zonas del país sin importar el daño y las consecuencias sobre el cuerpo humano y los animales. Ejemplos que desmientan a Duque hay por montones.
Sin ir más lejos, un ejemplo de ello sucede en Mocoa, Putumayo en donde actualmente se está librando una batalla jurídica para detener la práctica de la megaminería en las montañas del municipio por parte de una empresa internacional.
Las autoridades de la capital putumayense buscan a toda costa proteger las reservas ambientales de esta zona en donde comienza la Amazonía colombiana mientras que, por su parte, el Gobierno Nacional le ha dado luz verde a estas multinacionales para que extraigan los materiales preciosos sin importar el daño en la fauna, flora y las comunidades residentes en el sector.
Con base en lo anterior, es hipócrita y cínico hablar del cuidado del medio ambiente en Colombia cuando nuestros gobernantes nacionales priorizan el dinero y sus intereses particulares por encima de la flora y la fauna que abunda en nuestra geografía nacional.
Más que posar de ambientalista ante los presidentes mundiales y hablar cosas irreales se deben implementar estrategias verídicas para el cuidado del medio ambiente sin pensar en intereses económicos y priorizando el cuidado y fomento de las riquezas naturales.
Afortunadamente a los actuales gobernantes de turno les restan un par de meses para salir de sus puestos y esperamos que quien dirija las riendas del país en un futuro le dé la prioridad al cuidado del medio ambiente que se ha visto sin duda alguna afectado por las prácticas nocivas que ha impulsado el actual Gobierno Nacional.
Por: Juan David Galviz Eraso