Por: Sofonías Rodríguez M.
Los Ingenios, indios laboriosos que en su asentamiento más allá de ritos y danzas en honor a su dios, fueron los primeros en sacar azúcar de caña para consumo en casa y aplicar el famoso trueque que también se cumplía entre ellos. Sus descendientes mujeres hacendosas y hombres amantes del agro, muy rectos en las creencias divinas, iban trasmitiendo entre generaciones.
Fueron formando grupos familiares a quienes les quedó como tradición, rendir culto a las imágenes de Jesús y de María, encargo que han venido sosteniendo y que sigue latente en el corazón de todos quienes han nacido en el corregimiento de El Ingenio. Justa razón para entender que siempre conservarán su tradición como parte indispensable para hacer frente a este mundo terreno.
Un 21 de septiembre de 1.922,el obispo de Pasto Antonio María Puello de Val designó como primer párroco al padre Agustín Arévalo Bolaños, pero por quebrantos de salud lo reemplazó el padre Teófilo Albán Ramos y se erigió a esta localidad, veraniega por excelencia como parroquia Sagrado Corazón de Jesús, exaltación que ha propiciado un permanente compromiso de todos con Cristo y su iglesia.
Hoy luce hermoso y a todo color el marco de la plaza exhibiendo la elegante fisonomía de “pueblito lindo” que encantador se levanta entre la caña y el café».
El pueblo católico del corregimiento de El Ingenio, municipio de Sandoná, con el legado de la misma fe que inculcaron sus mayores que hasta ahora sigue firme y fortalecida en la fidelidad al Dios que en todo momento los acompaña, se sienten arropados a un profundo fervor religioso y vienen celebrando desde el 1 de septiembre el arribo a los cien años de creada la parroquia.
Esta comunidad de raza emprendedora y activa mantiene desde hace un siglo vivo su ADN de entusiasmo, colaboración y disponibilidad para hacer presencia en cualquier actividad, más si se trata de apoyo incondicional a cualquier trabajo con preferencia y devoción especial si es para alguna obra parroquial.
Loable labor cumple con la junta organizadora el padre Ibo Hoyos, que con la debida anticipación logró refaccionar y pintar el templo. Hoy luce hermoso y a todo color el marco de la plaza exhibiendo la elegante fisonomía de “pueblito lindo” que encantador se levanta entre la caña y el café.
Aunque por estos días se han estado desarrollando eventos recreativos, artísticos y culturales, la propia fecha de la fiesta es el 21 de septiembre, que por ser miércoles, se lo traslada al domingo 25 con actos religiosos presididos por monseñor Juan Carlos Cárdenas, obispo de la Diócesis de Pasto y populares con amplia y variada programación.
Felicitaciones para El Ingenio como parroquia en sus cien años.

