Edwin Ballesteros, representante a la Cámara del Centro Democrático, el pasado 8 de septiembre tomo la decisión de renunciar a su curul debido a una investigación que adelanta la Corte Suprema de Justicia en su contra, por presuntos hechos de corrupción cuando trabajó de la mano del exgobernador de Santander Richard Aguilar.
La curul no ha sido remplazada debido a que aun persisten dudas jurídicas sobre si en este caso, por tratarse de posibles delitos contra la administración pública, cabe la aplicación de la figura de la ‘silla vacía’.
A raíz de eso, la Cámara solicitó un concepto a la Fiscalía General -a mediados de septiembre- para establecer la condición judicial, de Ballesteros y determinar si dicho escaño puede ser ocupado o no. Sin embargo, el oficio no se ha respondido y la curul hasta el momento continúa vacante y en riesgo de perderse.
Lo que significa, que está en el limbo la posibilidad de que el Centro Democrático complete el número de congresistas con Liliana de Cote en esa corporación, quien es la siguiente en la lista de candidatos de esa colectividad y quien se había quedado por fuera con una diferencia de aproximadamente cien votos.
Sin embargo, no ocurre lo mismo en el Senado, tras la renuncia de Richard Aguilar, quien también está siendo indagado por presuntas irregularidades en contratación cuando se desempeñó como gobernador y quien si fue capturado por orden de la Corte Suprema de Justicia.
La curul que le pertenece a Cambio Radical, no ha podido ser reemplazado con Juliana Escalante, quien es la persona que sigue en la lista de ese partido político, esto se debe a que aún no ha llegado una notificación oficial por parte de la Corte Suprema.
No obstante, en el Congreso conjeturan que en este caso sí opere dicha figura teniendo en cuenta que el artículo 134 de la Constitución establece que la misma se da, desde el momento de la captura de algún funcionario por presuntos hechos de corrupción.
Con información de RCN Radio.