¡Cayeron “Los Fox”! Red de microtráfico operaba cerca de colegios en Pupiales

El silencio de la madrugada fue interrumpido por el sonido de los golpes en las puertas. Tres allanamientos simultáneos ejecutados por la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, pusieron fin a la operación de una banda que venía contaminando los entornos escolares de Pupiales.
El grupo delincuencial conocido como “Los Fox” fue desarticulado tras meses de seguimiento e inteligencia, en un operativo que dejó cuatro capturados e importantes elementos probatorios.

Los detenidos fueron identificados como Javier Jojoa, Dixon Burbano, Aleida Guerrero y Nidia Hurtado, presuntos integrantes de esta estructura que, según las autoridades, se dedicaba a la comercialización y distribución de sustancias psicoactivas, principalmente entre jóvenes y estudiantes.

Puntos estratégicos

Durante la acción policial se incautaron 415 pastillas de éxtasis, 750 bolsas herméticas, ocho teléfonos celulares y más de un millón de pesos en efectivo, elementos que eran utilizados para la preparación, dosificación y venta del estupefaciente. Las autoridades sostienen que los delincuentes habrían convertido algunos sectores residenciales y alrededores de instituciones educativas en puntos estratégicos para su actividad ilegal.

“Con esta operación se logra neutralizar una red que atentaba directamente contra la salud y la seguridad de nuestros niños y adolescentes. No permitiremos que la droga siga envenenando las aulas y las familias de Nariño”, afirmó un vocero de la Policía.

Estructura criminal

El grupo de investigación criminal de la Seccional de Protección y Servicios Especiales fue clave en la recolección de pruebas y en la identificación de los inmuebles utilizados como centros de acopio y distribución. Los allanamientos se realizaron de manera simultánea en distintos barrios de Pupiales, logrando capturar a los sospechosos en flagrancia.

De acuerdo con las investigaciones, “Los Fox” mantenían una red de distribución que se extendía a otros municipios del sur de Nariño y se abastecía mediante contactos con estructuras dedicadas al microtráfico en la frontera. Los capturados deberán responder ante la justicia por los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y concierto para delinquir.