A pesar de que existe una sentencia que le pide al Ministerio de Cultura, a la Gobernación de Nariño y a la Alcaldía de sostener el museo esto no se ha cumplido; de no ser así, este espacio podría finiquitar con sus actividades por falta de recursos.
Gran preocupación existe en quienes por 10 años han logrado mantener la Casa de la Memoria de Tumaco, un espacio que permite conocer la historia de este territorio, visibilizar a las víctimas del conflicto armado y formar en cátedras de paz a los habitantes del municipio, ya que esta podría cerrar en diciembre de 2022, debido a que no cuenta con los suficientes recursos.
Según lo expresado por el asesor de la Casa de la Memoria José Luis Foncillas, este espacio ha podido funcionar gracias a la ayuda de la cooperación alemana, quienes se retiran al finalizar el año. Sin embargo, la responsabilidad de su mantenimiento recae en el Ministerio de Cultura, Gobernación de Nariño y Alcaldía de Tumaco, esto teniendo en cuenta la sentencia conferida por el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Bogotá, Sala de Justicia y Paz.
Incumplen sentencia

“La Casa de la Memoria de Tumaco lamentablemente no tiene como seguirse sosteniendo hemos esperando que el estado asuma su responsabilidad, pero no lo ha hecho, no tenemos como continuar (…) Queremos denunciar que existe una Sentencia Judicial, que no se ha cumplido, la sentencia del 29 de septiembre de 2014 del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Bogotá, Sala de Justicia y Paz, misma que fue ratificada por la Corte Suprema de Justicia, mediante sentencia del 16 de diciembre del 2015”.
Según lo expresado, el apartado 69 de dicha sentencia le exhorta al Ministerio, Alcaldía y Gobernación, contribuir con el mantenimiento, continuidad y demás gastos de la Casa de la Memoria, en el entendido que se trata de una forma de preservar la historia de las violaciones a los derechos humanos y garantizar su no repetición. Pese a la existencia de este claro mandato las instituciones del Estado ahí exhortadas no han cumplido lo ordenado y la Casa de la Memoria no podrá tener mantenimiento, ni continuidad”.
Guardan esperanza
Esta iniciativa que hace parte de la Diócesis de Tumaco, ha sido merecedora del Premio Francoalemán de Derechos Humanos Antonio Nariño y el premio del Centro Nacional de Memoria Histórica a la mejor exposición museográfica de memoria del conflicto armado.
“Nosotros lo que pedimos es que sostengan a las dos personas que trabajan acá, eso se podría hacer si hubiera voluntad política porque si de verdad se cree que este museo es un aporte para la paz, esas dos personas se pueden sacar fácilmente del ministerio, de la Alcaldía o de la Gobernación”
“Tenemos la esperanza de que el gobierno se va a poner la mano en el corazón y va a decir hombre apoyemos esta iniciativa; el mensaje es a que no dejemos morir los lugares de memoria, que son lugares constructores de paz, que están educando a nuestro niños y jóvenes”.

