Por medio de un comunicado, Walter Wendler, presidente de West Texas University A&M, expresó la decisión con respecto al evento para recaudar dinero a una organización sin fines de lucro en la lucha contra el suicidio, lo que llamó una causa noble pero destacando también que la casa de estudios también busca el trato justo de todos por igual y no respalda actitudes «desmoralizadoras».
“WT se esfuerza por tratar a todas las personas por igual. Los espectáculos de drag son una misoginia burlona, divisiva y desmoralizadora, sin importar la intención declarada», escribió.
“Tal conducta va en contra del propósito de WT. Una persona o grupo no debe intentar elevarse a sí mismo o a una causa burlándose de otra persona o grupo”, agregó.
El director calificó las actuaciones de los shows drag queens como «exhibiciones incorrectas», lo que claramente no apoya. “No apoyo ningún espectáculo, actuación o expresión artística que denigre a otros, en este caso, a las mujeres, por ningún motivo”, declaró tomando como ejemplo el valor de cada persona como creación de Dios
«Todo ser humano es creado a imagen de Dios y, por lo tanto, persona digna”, agregó. “¿Un espectáculo de drag preserva un solo hilo de dignidad humana? Creo que no. Como una actuación que exagera los aspectos de la feminidad (sexualidad, feminidad, género), el drag muestra a las mujeres estereotipadas en extremos de dibujos animados para divertir a los demás y discriminar la feminidad”, afirmó. Para concluir su carta, el director citó Mateo 7:12 diciendo que la universidad debe estar en un nivel alto de reciprocidad con religiones y sociedades del planeta. “Entonces, en todo, haz a los demás lo que quieras que te hagan a ti, porque esto resume la Ley y los Profetas”, finalizó.
Spectrum, la organización LGBT de los estudiantes de dicha universidad se mostraron indignados por la decisión del director y defendieron lo que ellos llaman «la celebración drag» y pidieron que se reinstaurara el evento, además de criticar que su fe y el uso que le da «es poco profesional» pues creen en la separación de la iglesia y el estado. Otras alianzas de estudiantes de quejaron de la decisión del director por «causar daño a los estudiantes LGBT y a la comunidad en general con su religión», además de apoyar la idea que explica The Trevor Project, sobre la recaudación de fondos para prevenir el suicidio y como éste en personas LGBT es causado principalmente por creencias religiosas. Los grupos conservadores de Texas aplaudieron la decisión diciendo que es un «evento degenerado» y que «sus actuaciones lascivas» no pertenecen al campus.