El día del campesino institucionalmente establecido el 2 de junio, es una oportunidad para el reconocimiento de las tradiciones culturales de esta población. Sin embargo es también una ocasión propicia para establecer un intercambio sobre sus vivencias que se consideran parte fundamental en el crecimiento de la gente del campo y que nos identifica como nación.
Hasta allí lo de costumbre y como le hemos entendido, pero comparado el concepto del campesino de ayer con el de hoy, es preciso detenernos y ponerle atención sobre el objetivo de este último y en qué han revolucionado esas teorías conservadoras que lógicamente causan reacción en medios ciudadanos.
Ahora los hijos de los campesinos, cuyos padres que le han dedicado toda su vida a ganar un jornal para el sustento de su familia, ya no es como antes que los jóvenes descendientes de trabajadores heredaban de sus mayores el amor al campo y hasta se sentían orgullosos de tomar las banderas de sus progenitores- Tal vez se han visto motivados por el estudio y por decirlo de alguna manera, le han declarado como la libertad de vivir esclavos del oficio de labrar la tierra.-
Hoy seguramente atraídos por el adelanto de la ciencia y la tecnología, las nuevas generaciones por escasa de recursos que sea su familia, le exigen a sus papás el total apoyo para seguir una carrera profesional y no continuar ese ritmo cruel de estar al sol y al agua en el cultivo, cuidado y cosecha de los cultivos propios de estos climas.-No hay recambio y aquí surge otro fenómeno y es el de tener todavía en las fincas o haciendas a gente veterana-La pregunta es cuando mueran estos caballeros quién se va encargar de la agricultura?’
Una señora que desde años vive en la vereda Alto Jiménez quien con su esposo se dedican a cultivar tomate y mora me contaba el otro día que su hijo cuando terminó el bachillerato, de inmediato les dijo a sus padres: “A mí me gusta la medicina y por favor me colaboran.- Hizo como tres pruebas de admisión y en la última fue admitido en una universidad pública de Norte de Santander. Imagínese el gasto de esa familia.- Ya va en Séptimo semestre, es juicioso y está metido de lleno, pero el costo es alto ya por estadía, materiales e imprevistos.-
En otros casos les obligan a sus padres a que les compre moto y si de ropa se trata, tiene que ser de marca, celulares de alta gama y consentirles fiestas y reuniones con amigos,muy contrario a lo que antes se miraba en la juventud campesina: sumisión,recato, obediencia, humildad y respeto por los mayores.
Hoy vale preguntarse: quién está perdiendo y quién se encargará en adelante de las sementeras para mercar? Grave problema social!!!

