En una operación coordinada por la Fiscalía 113 Especializada de Villavicencio y la Policía Nacional, se logró la captura de Pablo Emilio López Martínez, conocido como alias ‘Chirivico’. Este individuo, considerado el mayor reclutador de menores en el Cauca, fue detenido en la capital del departamento del Meta, marcando un importante avance en la lucha contra el reclutamiento forzado de niños y adolescentes.
Delitos
Alias ‘Chirivico’ era buscado por la justicia desde enero, cuando la Fiscalía expidió una orden de captura en su contra por los delitos de concierto para delinquir agravado y fabricación, tráfico y porte de armas de fuego. Según las autoridades, su papel era fundamental en la entrega de menores al bloque Martín Villa de ‘Iván Mordisco’ en Mesetas, un grupo armado que llegó a contar con hasta cien hombres en su mejor momento.
Rituales
La captura se llevó a cabo en una vivienda donde se encontró un altar de santería, evidenciando que, ‘Chirivico’ podría haber estado practicando rituales con la esperanza de evadir sus responsabilidades legales. El reclutamiento forzado de menores sigue siendo una crisis alarmante en Colombia, con 297 casos reportados entre enero y diciembre de 2024, según la Defensoría del Pueblo. Este fenómeno afecta desproporcionadamente a comunidades indígenas y rurales, donde los menores son más vulnerables a ser cooptados por grupos armados ilegales. La Defensoría ha advertido que estas cifras podrían ser solo una fracción del problema real debido al subregistro existente.
Acciones
En respuesta a esta problemática, la Defensoría anunció la creación de una Mesa Técnica de Trabajo Permanente en colaboración con el Departamento Nacional de Planeación, para desarrollar estrategias conjuntas que aborden el reclutamiento forzado y otros problemas relacionados, como el desplazamiento forzado y el fortalecimiento del Sistema de Alertas Tempranas.
La captura de ‘Chirivico’ no solo representa un golpe significativo a las redes de apoyo de las disidencias en la Orinoquia, sino que también reafirma el compromiso de las autoridades por proteger los derechos de los niños, niñas y adolescentes en la región.
Al mencionado sujeto se le atribuye la responsabilidad de coordinar el ingreso de material de guerra destinado a las disidencias y de haber estado involucrado en acciones terroristas, como el lanzamiento de explosivos con drones en resguardos indígenas.