¿Te imaginas 20.000 elefantes caminando por un parque en Alemania?
Pues este martes, el presidente de Botsuana amenazó con enviar esa cantidad de animales al país europeo debido a un debate sobre conservación ambiental.
La historia comenzó a principios de este año, cuando el ministerio de medio ambiente de Alemania sugirió regular la importación de trofeos que proceden de la caza de animales.
Esto hizo que el presidente de Botsuana, Mokgweetsi Masisi, reaccionara y dijera a través de los medios alemanes que una decisión así solo ayudaría a empobrecer a su país.
“Los alemanes deberían vivir con los animales en la forma en que están diciendo que lo hagamos nosotros. Y no estoy bromeando”, explicó Masisi al diario alemán Bild.
Botsuana tiene casi un tercio de la población de elefantes del mundo -cerca de 130.000- muchos más del espacio disponible para ellos.
De acuerdo al mandatario africano, las manadas de elefantes causan daño a la propiedades, se comen las cosechas de los campesinos y pisotean a los residentes.

