Con una inversión que supera los $20 mil millones de pesos, la obra de la Troncal Santa Mónica Fase 1 avanza en un 39,49% de ejecución, consolidándose como una de las intervenciones más significativas para mejorar las condiciones de vida de los habitantes de este importante sector de Pasto.
El proyecto busca resolver problemáticas históricas de la zona, entre ellas las inundaciones, el mal estado del sistema de alcantarillado y la alta contaminación que por años ha afectado al río Pasto. Su ejecución marca un hito en materia de infraestructura sostenible y de saneamiento básico para la ciudad.
Supervisión
La funcionaria Vanessa Córdoba Garzón destacó los avances obtenidos hasta la fecha durante una visita de supervisión realizada en los barrios surorientales, donde actualmente se concentran los trabajos. “Hasta hoy tenemos un balance muy positivo con una ejecución de más del 39%”, señaló.
Los habitantes del sector reconocen que estas acciones representan una solución a necesidades urgentes, especialmente para quienes se han visto afectados por el deterioro del sistema de alcantarillado y por la falta de intervención en el manejo de aguas lluvias.
Además de mitigar las inundaciones, el proyecto reducirá el impacto ambiental sobre el río Pasto, favoreciendo la recuperación del entorno natural y generando mejores condiciones de salubridad en la zona.
Exigencias
Todo ello se suma al compromiso de construir una ciudad moderna, sostenible y digna, donde la infraestructura responda a las exigencias de un territorio en crecimiento y permita a las familias vivir con tranquilidad.
Este avance ha sido posible gracias al respaldo del Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio, que ha apoyado de manera decidida la gestión local para hacer realidad este proyecto.
Las autoridades esperan que la obra se convierta en un referente de planeación urbana y saneamiento, y que al culminar su primera fase siente las bases para continuar con la transformación de la Troncal Santa Mónica en beneficio de toda la ciudad.
Con la intervención en marcha, se abre la expectativa de un futuro con infraestructura resiliente y un mejor manejo del recurso hídrico, reafirmando el compromiso de Pasto con el desarrollo ordenado y sostenible.

