La Superintendencia Nacional de Salud confirmó que en agosto arranca la auditoría forense a Nueva EPS, la aseguradora más grande del país con más de 11 millones de afiliados. El proceso, a cargo de una firma internacional, revisará las cuentas desde 2019 hasta 2025. Auditoría forense a Nueva EPS arranca en agosto y destapará 7 años de cuentas.
El anuncio lo hizo el superintendente Giovanny Rubiano durante la primera reunión nacional con gerentes regionales y nacionales de la EPS. Según dijo, la auditoría permitirá detectar irregularidades, depurar cifras y fortalecer mecanismos de control.
“Hay pagos sistemáticos dentro de la red propia de algunas EPS, lo que ha afectado gravemente a otras IPS públicas y privadas. Eso es un conflicto de interés profundo”, afirmó Rubiano.
Este movimiento llega tras 11 meses de intervención a la Nueva EPS, tiempo en el que se identificaron deficiencias en los sistemas de información y problemas para auditar cuentas médicas en tiempo real.
Estados financieros de 2023 se publicarán a finales de julio
Rubiano también reveló que los estados financieros de la vigencia 2023 de Nueva EPS ya fueron certificados. Solo falta el dictamen de la contralora de la entidad para que sean publicados oficialmente a fin de mes.
“Hasta ahora conoceremos los estados financieros de Nueva EPS para 2023. Me informó el interventor que ya están certificados, y pendientes por ser dictaminados”, señaló Rubiano.
Esta información es clave para evaluar la viabilidad de la EPS, luego de que la Supersalud advirtiera en 2024 que la entidad no entregó los reportes correctamente ni en los formatos requeridos por la normativa vigente.
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Supersalud alerta sobre deudas, glosas y fallas en atención primaria
El superintendente insistió en que el modelo de atención centrado en la enfermedad ha debilitado el sistema de salud. Señaló que el 80 % de las enfermedades podrían resolverse en el primer nivel, pero que la falta de inversión lo hace inviable.
También hizo un llamado a superar la cultura de la glosa y el endeudamiento:
“Hay que cambiar la cultura de la cartera por una de control y auditoría permanente de las cuentas médicas”.
Finalmente, cuestionó el desequilibrio entre médicos generales y especialistas, y pidió más incentivos para el talento humano en salud, especialmente en zonas apartadas.