En entrevista con la emisora Blu Radio, el general Juan Carlos Fajardo González, comandante de la Séptima División del Ejército, confirmó que los militares asesinados en Antioquia cayeron en una trampa tendida por disidencias de las FARC, específicamente el grupo de ‘Iván Mordisco’.
Los hechos ocurrieron en el municipio de Valdivia, en una zona rural donde las tropas se encontraban en operaciones contra el “Clan del Golfo”. El resultado fue trágico: seis soldados muertos y tres heridos debido a un campo minado.
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«Estábamos en una operación contra el “Clan del Golfo” cuando el Estado Mayor Central de las FARC activó un campo minado. Esto afectó gravemente a nuestras tropas, resultando en esta catastrófica pérdida», dijo.
El general Fajardo explicó que las tropas del ejército fueron desviadas de su misión original contra el “Clan del Golfo”, solo para caer en un campo minado preparado por las disidencias de las Farc en esta zona de Antioquia. Este acto representa una violación flagrante del Derecho Internacional Humanitario y los protocolos del cese al fuego bilateral.
En el diálogo también se abordó la posibilidad de que esta acción haya sido llevada a cabo en colaboración con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), dado que ambas organizaciones tienen una presencia histórica en la región de Valdivia y el Bajo Cauca. Sin embargo, hasta el momento, la información concreta solo involucra al Estado Mayor Central de las FARC.
«No podría precisar si hay una alianza en este caso específico, aunque sabemos que normalmente operan juntos», indicó el general Fajardo.
El campo minado se encontraba en una zona rural transitada regularmente por campesinos, incluyendo mujeres, niños y ancianos, lo que aumenta el riesgo para la población civil.
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«Estas áreas son transitadas permanentemente por civiles, lo que hace que este tipo de acciones sean aún más peligrosas», explicó Fajardo.
El general Fajardo fue enfático en señalar la responsabilidad de los grupos armados en estos hechos y destacó el incumplimiento del cese al fuego acordado con el Gobierno.
«La responsabilidad es de quienes están en un proceso de paz y no cumplen con los acuerdos. Estas acciones muestran un desprecio total por la vida y la seguridad de los colombianos«, afirmó Fajardo.
La situación en Valdivia, Antioquia, sigue siendo tensa, con investigaciones en curso para esclarecer los detalles de la emboscada y mejorar las medidas de seguridad para prevenir futuras tragedias. El Ejército continúa sus operaciones en la zona, decidido a proteger a la población y asegurar la estabilidad en la región.