En San Andrés de Tumaco, hizo presencia el director de Emigración Colombia, Fernando García, con el objetivo de articular esfuerzos con dependencias del orden nacional, para iniciar un diálogo con entidades departamentales, municipales y organizaciones sociales del territorio local, y así poder identificar cuáles son las necesidades y problemáticas, buscando propuestas de solución que aquejan a la comunidad.
El funcionario precisó que es fundamental concretar mesas de trabajo con la comunidad puesto que ellos conocen de primera mano cuales son las situaciones que más preocupan. Sostuvo, que para acelerar y dar una pronta salida a la crisis social que se afronta, en especial el paso migratorio; las organizaciones deben manifestar cual debe ser la vía para lograr cambios que conduzcan a mejorar sus condiciones de vida.
Condiciones
El director de Emigración Colombia, se refirió al papel que cumple la entidad en la cuestión de frontera, más exactamente en el sector de Mataje, quien dijo “son ustedes los ciudadanos los que conocen las condiciones del territorio y que características debería tener esta vía. Espero que las organizaciones sociales den a conocer las problematicas de este sector al Ministerio del Transporte, en temas de tiempo y financiación”.
“En el caso de Migración nosotros no podemos desarrollar nuestras actividades actualmente en Mataje, donde las instalaciones que tiene la entidad ya están construidas. Para tomar medidas primero se debe llegar a un acuerdo con las autoridades ecuatorianas para que se pueda abrir el puesto de control, de esta manera se podría trabajar conjuntamente con jurisdicciones colombianas de tal manera que se pueda garantizar mayor seguridad en este paso fronterizo entre Colombia y Ecuador”, enfatizó García.
Finalmente, resaltó que “uno de los retos es abrir el puesto de Mataje con el fin de tener un mayor control de los flujos migratorios, además de garantizar y velar por el bienestar del paso de las personas. Colombia, firmó un instrumento internacional que se llama el Convenio una Convención Internacional de Derechos Humanos donde uno de los puntos afirma que los migrantes tienen libre derecho a la movilidad, no es un delito moverse, porque personas por diferentes motivos han llegado a una situación de crisis en sus países y se ven obligados a transportarse por un mejor vivir”.

