EDITORIAL

AMENAZA A LAS ELECCIONES EN NARIÑO

Muy preocupados nos ha dejado el informe de la inteligencia colombiano sobre la alianza de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional Eln y las disidencias de las Farc, la cual, de acuerdo con los datos que se han podido recopilar, busca desestabilizar el orden  público en nuestro Departamento de Nariño y en otras zonas de Colombia, de cara a las elecciones al Senado, Cámara de Representantes y curules de la Paz, que se llevarán a cabo el próximo 13 de marzo y los comicios a la Presidencia de la República, el 29 de mayo del presente año.

Nos parece una alerta “no tan temprana” puesto que como se puede ver, los mencionados procesos se encuentran ya a la vuelta de la esquina y por lo tanto, es la hora para que el Gobierno Nacional y las diferentes autoridades, le presten la mayor atención posible a esta nefasta alianza entre grupos generadores de gran violencia como lo son el Eln y las disidencias.

Sin embargo, tenemos que decir que los antecedentes de esa amenaza, los tenemos en el Departamento de Nariño, desde el año pasado, con énfasis en nuestra costa Pacífica, donde el accionar de grupos alzados en armas, provocó en la mitad del 2021 un gigantesco episodio de desplazamiento, en el llamado Triángulo del Telembí, que comprende los municipios de Roberto Payán, Magüí y Barbacoas.

Ahora, de acuerdo con los datos recopilados por la inteligencia colombiana, la guerrilla del Eln, en asocio con las disidencias de la extinta Farc y otros grupos ilegales, tienen diseñado un elaborado plan que busca afianzar su dominio en vastos sectores de la geografía nariñense y, a la vez, boicotear las elecciones legislativas y presidenciales de marzo y de mayo.

 

«Muy preocupados nos ha dejado el informe de la inteligencia colombiano sobre la alianza de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional Eln y las disidencias de las Farc, el cual, de acuerdo con los datos que se han podido recopilar, busca desestabilizar el orden público en el departamento de Nariño».

 

Es así como el inquietante informe que nos llega ya a pocas semanas para la realización de esos comicios, se refiere además a la intención de los  involucrados en el complot de generar descontento social entre las diferentes comunidades, con el objetivo de causar desordenes  y otros hechos de alteración del orden público, que atenten contra el normal desarrollo de las elecciones y una prueba de esas intenciones, sería los delicados sucesos que se viven en estos momentos en el municipio de El Charco.

loading...

Además, no podemos dejar a un lado el hecho de que, en estas elecciones legislativas del 13 de marzo, se llevarán a cabo por primera vez en Colombia, los comicios para las curules de la Paz, un proceso que nació del acuerdo firmado entre el Gobierno Nacional y la entonces guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia Farc, cuyo objetivo primordial es el de darle representación en el Congreso de la República, a las víctimas del conflicto armado.

Por lo tanto, no es una casualidad que los 16 municipios del Departamento de Nariño, que serán escenario de esas elecciones, sean los que mayormente sufrieron el impacto del conflicto armado, como lo son las 11 poblaciones de la Costa Pacífica, al igual que 5 de la cordillera y en donde, desde el año pasado se vienen presentando toda clase de alertas tempranas, relacionadas con situaciones de orden público y actividades de grupos ilegales.

Al respecto, hemos conocido denuncias en torno a amenazas e intimidaciones en contra de los candidatos a esas curules, así la ocurrencia de otros hechos irregulares cuyo objetivo es sabotear los procesos electorales que se cumplirán este año.

Por lo tanto, nuestro perentorio llamado es para que tanto las autoridades departamentales como nacionales tomen muy en serio el reporte de la inteligencia colombiana y procedan de inmediato a tomar las medidas que sean del caso para hacerle frente a lo que se constituye una grave amenaza, de los grupos armados ilegales, no solo de intentar dañar las elecciones, sino también de fortalecer su presencia, para aumentar la extensión de su dominio y recuperar el control territorial.  Por lo tanto, es tiempo de actuar.