El alcalde de Pasto, Nicolás Toro Muñoz, anunció una de las decisiones más contundentes de su administración frente a la organización del Carnaval de Negros y Blancos: la reducción del 50% de las graderías y la eliminación total de la venta informal de puestos en el espacio público. El mandatario fue enfático al señalar que la máxima fiesta de los pastusos no puede convertirse en un negocio de pocos.
En entrevista con Nariño Noticias, Toro Muñoz afirmó que el Carnaval pertenece a la ciudadanía y debe vivirse de manera libre, abierta y democrática. “El mejor carnaval del mundo no puede ser pagado por todos para el beneficio de unos pocos. Yo soy pastuso y quiero que mis paisanos vivan, sientan y tengan en sus manos cada componente de esta fiesta tan bonita”, aseguró.
Como parte del plan de recuperación de la Senda del Carnaval, la administración municipal inició el desmonte de la mitad de las graderías que tradicionalmente se comercializaban. Según explicó el alcalde, estas estructuras solo estarán ubicadas en el sector de San Juan Bosco, garantizando que la mayor parte del recorrido quede libre para el disfrute gratuito de propios y visitantes.
El mandatario también desmintió versiones que señalaban que el traslado de la Senda a la carrera 27 buscaba aumentar el número de graderías pagas. “Eso es falso. Aunque ahora cabe más gente, nunca se pensó en aumentar las graderías como en administraciones anteriores. Por el contrario, se han reducido para que quien quiera pagar lo haga, pero para que la mayoría se apropie de las calles de manera libre y gratuita. Un carnaval para la gente, como debe ser”, enfatizó.
Frente a la ocupación indebida del espacio público con andamios, sillas y estructuras improvisadas, Toro Muñoz fue categórico: “No vamos a permitir la venta de un solo puesto”. Recordó que los andenes y las vías son de interés común y no pueden ser utilizados para el usufructo exclusivo de particulares.
Por su parte, el gerente de Corpocarnaval, Andrés Jaramillo, respaldó la medida con cifras técnicas. En años anteriores se instalaban 12 graderías entre la Plaza de Nariño y la calle 18, con capacidad para 4.800 espectadores en zona VIP. Para esta edición, el número se redujo a seis graderías y un aforo de 2.400 personas, lo que permitirá despejar la Senda y facilitar el acceso libre de más turistas, pastusos y nariñenses.
Desde la organización del Carnaval se aclaró que los recursos recaudados por las graderías autorizadas se reinvierten directamente en el sostenimiento de la fiesta y en los gastos operativos que garantizan su calidad artística y logística.
Con estas decisiones, la Alcaldía de Pasto reafirma su compromiso con un Carnaval incluyente, popular y verdaderamente ciudadano, preparándose para demostrar, una vez más, por qué el mundo entero fija su mirada en la capital nariñense. ¡Que viva el Carnaval de Negros y Blancos, el mejor carnaval del mundo!

