El reciente diálogo entre el alcalde Nicolás Toro, padres de familia, docentes y la comunidad educativa del Colegio Ciudad de Pasto ha dado frutos, permitiendo llegar a una serie de acuerdos que buscan poner fin a las manifestaciones que se habían desatado por la prolongada inconclusión de la construcción de la sede Lorenzo, que lleva más de cinco años en estado de abandono.
Durante una reunión celebrada en el mismo colegio, se discutieron las preocupaciones de la comunidad sobre las condiciones de infraestructura que afectan a estudiantes y personal administrativo.
La Secretaria de Educación de Pasto, Piedad Figueroa, afirmó que uno de los compromisos más relevantes es el mejoramiento de la infraestructura del colegio, que no solo incluye la finalización de la sede Lorenzo, sino también el mantenimiento y adecuación de los espacios existentes para garantizar un ambiente seguro y propicio para el aprendizaje.
«La educación de nuestros hijos no puede esperar más. Estamos comprometidos a trabajar junto a la comunidad para que nuestros estudiantes tengan las condiciones adecuadas para aprender y desarrollarse», expresó Figueroa durante la reunión.
Necesidad
Los padres y docentes manifestaron su gratitud por la atención a sus demandas, aunque también enfatizaron la necesidad de un seguimiento riguroso para asegurar que los compromisos se cumplan en los plazos establecidos.
Por su parte, el estudiante Cristian Gómez, en representación de sus compañeros, comentó: «Estamos aliviados de que nuestras voces hayan sido escuchadas. Llevamos mucho tiempo esperando por soluciones, y ahora tenemos la esperanza de que, con el apoyo de las autoridades, nuestra escuela será un lugar más seguro y agradable para aprender». Esta declaración resonó entre los asistentes, quienes aplaudieron la decisión de continuar el diálogo y trabajar en conjunto para mejorar la situación actual.
El alcalde Toro, en su intervención, reiteró su compromiso con la educación en Pasto, indicando que se implementarán medidas inmediatas para asegurar el avance de la construcción de la sede Lorenzo.
Entorno
«No podemos permitir que nuestros jóvenes sigan estudiando en condiciones precarias. Es una prioridad que esta obra se concluya y que se tomen medidas de seguridad para proteger a todos los que hacen parte de esta comunidad educativa», aseguró el alcalde.
Además del enfoque en la infraestructura, se discutieron planes para el reforzamiento de la seguridad en el colegio. Se acordó la implementación de patrullajes regulares y la colaboración con la policía local para garantizar un entorno seguro para todos los estudiantes, docentes y administrativos.
Las manifestaciones del Colegio Ciudad de Pasto habían atraído la atención no solo de la comunidad educativa, sino también de diversos sectores de la sociedad, que vieron en estas acciones un llamado urgente a la atención sobre los problemas de infraestructura educativa en la región. La respuesta rápida de las autoridades locales demuestra un cambio en la gestión y la importancia de la participación ciudadana en la toma de decisiones.