Debemos reconocer nuestra admiración a los moradores del barrio Villa Lucía de Pasto, por soportar durante más de 20 años la amenaza que representa vivir en unas casas construidas encima de unos socavones de arena, por lo cual se constituyen en un permanente riesgo para la integridad física de sus moradores.
Nos estamos refiriendo a unos hechos que han sido denunciados múltiples veces, sin que esta sea la hora de que se haya hecho algo al respecto, por lo que el peligro es latente para docenas de familias que ya no saben a quién acudir en busca de una solución a su delicada problemática.
La situación que hoy afrontan quienes habitan las viviendas de Villa Lucía es el reflejo de épocas pasadas, donde la improvisación era el común denominador y de manera irresponsable se permitía la construcción de viviendas en suelos y terrenos inestables, como es el caso que hoy nos ocupa.
No de otra manera se puede explicar cómo es posible que se hayan emprendido obras de construcción sobre socavones, lo que tiempo después, además del riesgo que representa esta situación, es la causa para que varias de las viviendas presenten grietas, así como señales de hundimiento.
«La situación que hoy afrontan quienes habitan las viviendas de Villa Lucía es el reflejo de épocas pasadas, donde la improvisación era el común denominador y de manera irresponsable se permitía la construcción de viviendas en suelos y terrenos inestables, como es el caso que hoy nos ocupa».
A consecuencia de esto, los propietarios afrontan toda clase de dificultades, puesto que no pueden alquilar o vender sus propiedades, ya que nadie las acepta en las visibles condiciones de deterioro que presentan.
En ese sentido, directores de gestión de riesgos de desastres, como Diego Gómez, han señalado en diferentes ocasiones que, ante la construcción irregular, el sector de Villa Lucía en la Comuna Dos de Pasto presenta áreas en las que en el momento menos pensado se podría registrar un pavoroso desastre.
De esta manera, a través del tiempo, este singular caso de Villa Lucía ha sido conocido y analizado por diferentes actores y, en ese sentido, se recuerda como en el año 2015 el concejal y ponente del Plan de Ordenamiento Territorial POT de Pasto, Ricardo Cerón, informó que se había concertado con la comunidad de Villa Ángela (sector que afronta el mismo problema de hundimiento) y de Villa Lucía, la realización de un estudio a corto plazo, pero la verdad sea dicha, esto no se constituyó en ninguna solución.
Lo cierto es que, para los moradores de Villa Lucía, resulta poco menos que inexplicable el que se hayan autorizado licencias de construcción en donde hubo explotación de minas de arena, lo que en diferentes etapas ha sido la causa para hundimiento de calles, así como averías en las infraestructuras de las viviendas.
Nos parece, entonces, que esta problemática de Villa Lucía requiere de la mayor atención. En ese sentido no nos parece una buena idea de que sea la misma gente, sin ningún conocimiento técnico, la que rellene por su propia cuenta sus casas o los lugares donde se presentan hundimientos.
Es cierto que ante la gravedad de lo que ocurre, los moradores de Villa Lucía están exentos de pagar el Impuesto Predial, lo que no deja de ser un alivio, pero a pesar de todo, es evidente que el sector presenta decadencia, puesto que las casas son muy díficiles de comercializar, a la vez que no se puede hacer ninguna clase de ampliación, ante el inminente riesgo de derrumbe que esto representa.
Es importante saber que la Alcaldía de Pasto viene realizando unas acciones importantes como el de determinar los lugares donde hay socavones, para lo cual se cuenta con la colaboración de diferentes dependencias como es el caso de la Secretaría de Planeación, por lo que estaremos a la expectativa de las decisiones que se puedan tomar en torno al barrio Villa Lucía y su difícil situación.