Por: Mauricio Fernando Muñoz Mazuera
El pasado 26 de septiembre la oposición convocó a una marcha para demostrar su descontento frente a la gestión del primer mes del gobierno del presidente Gustavo Petro. Entre las distintas motivaciones que llevaron a marchar a estas personas está el conocidísimo foro de Sao Paulo, el castrochavismo, el comunismo y demás ideas ya conocidas. Sin embargo, entre amenazas del paramilitarismo y golpes de estado, una mujer identificada por las autoridades como Esperanza Castro participante de esta marcha saco lo más rancio del pensamiento colombiano afirmando que la vicepresidenta Francia Márquez es un «simio» agregando a esto que “los negros no estudian y solo sirven para ser delincuentes”.
Sin lugar a dudas cualquier persona que en pleno 2022 conozca de estas afirmaciones demostrara su descontento frente a las mismas pues desconocer que nuestro país es multiétnico y pluricultural además sumado a esto fomentar el racismo y clasismo es irse en contra de la constitución y las leyes que sostienen este país.
Este tipo de afirmaciones son una muestra inequívoca que somos una sociedad enferma, que escribimos y cantamos, sobre igualdad y hermandad pero todo esto es mentira, somos una sociedad que aún no puede aceptar que en la diferencia está la mayor riqueza y sin importar lo que pase con las futuras generaciones, las estamos formando en medio de un ambiente envenenado.
Para todas aquellas personas que se creen mejor por su color de piel o por las fortunas que manejan les tengo algunos datos que les permitirán analizar que por muy “arios” que se crean, ha habido afrodescendientes muy importantes en la historia de nuestro país. En el año de 1891 Colombia tuvo su primer presidente de color y fue Juan José Nieto, Bonnie Prado y Raúl Cuero se ha distinguido en el área de las ciencias, en la música tenemos a Petronio Álvarez, Toto la Momposina, Joe Arroyo y Jairo Varela, en las letras esta Liliana Angulo Cortés, Manuel Zapata, Candelario Obeso y Mary Grueso.
Al leer estas líneas algunas personas dirán, “pero a muchos de estos personajes no los conozco” y esto se debe a que poco investigamos, o solo nos quedamos con la información sesgada que se da por los medios tradicionales, pero muy seguramente si reconocerán estos nombres: Antonio Kid Pambelé, quien hizo vibrar a todo el país al ganar títulos mundiales de boxeo, Fredy Eusebio Rincón, quien con su gol ante la “pura” Alemania, nos llevó por primera vez a disputar el cuarto partido en un campeonato mundial de futbol. Faustino “El Tino” Asprilla, quien abono el camino a las nuevas camadas de futbolistas en el viejo continente a fuerza de gambetas, goles y volteretas, María Isabel Urrutia, la mujer que nos hizo saber que era conseguir un oro en los juegos olímpicos. Estos son algunos ejemplos de afrodescendientes que han puesto en alto el nombre de nuestro país, personas llenas de virtudes, y también con defectos, como todos nosotros, pero que, sin importar el odio racial, dicen con orgullo… Soy colombiano.
Finalmente, y como reflexión final, es extraño que a pesar que existen representantes de las negritudes en el congreso de la república, máximo recinto de la democracia y del pensamiento, estos personajes callan frente a las ofensas proferidas por la señora Castro… con representante así, para que más enemigos.

