Por: Claudia Zambrano Erazo.
Nuestra costa nariñense, ese lugar espectacular lleno de gente linda, trabajadora, valiente, fuerte, talentosa y con esos paisajes espectaculares capaces de enamorar a cualquiera está gritando de manera desesperada que no la olviden,
Es increíble que en pleno siglo XXI existan viviendas en la zona rural de Tumaco que no cuentan con agua potable, es más es inconcebible que el Puerto de Nariño no tenga servicio de agua y esa es solo una de las principales necesidades de este territorio, porque a decir verdad son muchas las carencias que viven las comunidades de estas zona.
Tumaco siempre ha sido reconocido a nivel nacional, lamentablemente por los actos de violencia y porque sin exagerar, diariamente la noticia que circula es de asesinato a líderes sociales y excombatientes, combates, casos de sicariato, desplazamientos y si seguimos sumando, docenas de cosas tristes que no representan para nada a esta zona del departamento de Nariño.
La situación de las vías es una noticia semanal, la falta de presencia de los gobiernos nacional, departamental y local conllevan a la comunidad indígena a tomar medidas de hecho y parar la movilidad. Los bloqueos y paros se han convertido en la única alternativa para que les pongan atención y de alguna manera mostrar su grito desesperado de que algo malo está pasando y nadie quiere hacer caso.
Creo que a veces somos muy egoístas a la hora de pensar en los otros, nosotros en una ciudad como Pasto en donde si bien no hay todo, a la mayoría no nos falta nada, tenemos servicio de energía, agua potable, aseo y raramente se presentan situaciones de violencia, podemos vivir tranquilos, ¿pero? qué pasa cuando se bloquea la vía por más de 24 horas como la anterior semana en el sector de La Guayacana y los cientos de personas que necesitaban llegar a Pasto o a Tumaco simplemente deben quedarse en sus carros paralizados esperando a que alguien aparezca.
Esta es la realidad de la costa, una zona que no progresa porque nadie le pone el ojo y más que eso los recursos que tienen nunca se los evidencia por ninguna parte. El llamado es urgente, no podemos permitir seguir rezagando a uno de los sitios más importantes de Nariño, este territorio que nos ofrecen puerto, alimento, turismo y combustible y evidentemente es un lugar estratégico para mejorar la economía de esta región que necesita desesperadamente progresar.