Nosotros, aquí en el Departamento de Nariño, hemos tenido a través de los años, amargas experiencias con las temporadas de lluvias, las cuales le han costado la vida a muchas personas.
De allí, el llamado que siempre hacemos, en especial a los alcaldes para que no dejen que el invierno los sorprenda, lo que ha ocurrido más de una vez, con consecuencias bastante graves.
Hoy hacemos esa reiteración, puesto que, de acuerdo con los pronósticos dados a conocer en las últimas horas por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales Ideam y el Ministerio de Ambiente, nos esperan después de la segunda quincena de este mes de septiembre, días de fuertes precipitaciones, las cuales se prolongarían hasta el mes de diciembre.
En ese sentido, el reporte que se hace es que el aumento de las lluvias, será de un 30 por ciento, lo que se constituye en un porcentaje inquietante, que en un momento dado puede ser la causa para que se produzcan en la geografía nariñense, emergencias como inundaciones y derrumbes, hechos que en más de una oportunidad se han constituido en verdaderos dolores de cabeza.
Por ello, esperamos que las autoridad departamental y municipales, en Pasto y en todos los municipios del departamento tengan muy en cuenta el reporte que acaba de hacer el Ideam y el ministerio de Ambiente, para que, desde ya, puesto que no podemos olvidar que nos encontramos en el mes de septiembre, se pongan en marcha las estrategias que sean del caso, para minimizar, lo más posible, los efectos de la ola invernal que nos espera.
Nos estamos refiriendo a una situación preocupante puesto que en el mismo reporte se indica que existe un 86 por ciento de probabilidades de que persista el Fenómeno de la Niña, lo que en otras palabras significa que habrá lluvias torrenciales en nuestra región Andina. Se trata de precipitaciones que pueden ser la causa para el desbordamiento de los ríos, lo que en las temporadas de invierno, ha sido una constante en los municipios de nuestra costa Pacífica.
Nosotros, aquí en el Departamento de Nariño, hemos tenido a través de los años, amargas experiencias con las temporadas de lluvias, las cuales le han costado la vida a muchas personas.
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Dice un antiquísimo refrán que “guerra avisada no mata soldado”, por lo que, la actitud responsable que deben asumir nuestros mandatarios, es el poner en marcha, los planes de choque, los cuales lógicamente deben incluir campañas de permanente información a las comunidades, sobre las acciones que deben emprender, para que el invierno no los vaya a convertir en víctimas.
Sabemos muy bien, que las intensas lluvias que nos están pronosticando, son la causa directa, para las destructivas inundaciones, así como los derrumbes y los deslizamientos de tierra
reduzcan los riesgos como inundaciones, desplomes y deslizamientos de tierra.
En este orden de ideas, también nos parece que es de transcendental importancia, el que desde ya se inicie el proceso de actualización de los mapas de riesgo o amenaza, teniendo en cuenta que de acuerdo con sus antecedentes u otros motivos como las cercanías a ríos y quebradas, cada zona de nuestro departamento de Nariño, requiere de una atención diferente.
Confiamos entonces en la responsabilidad de nuestros mandatarios en lo que tiene que ver con el manejo de estos procesos de prevención que son tan importantes en estos momentos, cuando todo apunta a que vamos a tener una temporada de lluvias bastante fuerte. Por ello, estamos seguros que la prevención se constituirá en la mejor herramienta para enfrentar esta nueva oleada invernal que de acuerdo con los informes de las autoridades metereólogicas, se nos acerca, cargado de amenazas.