Por: Emilio Jiménez.
Cuando se entiende o se reflexiona sobre la idiosincrasia sociopolítica del país, se pueden hasta salvar vidas. No podemos desconocer la cantidad de grupos armados que hay en nuestro país y, lo más grave, casi siempre ellos son solamente los autores materiales; los actores intelectuales o quienes dan las órdenes ni siquiera están en el monte, al contrario, se ubican en salas muy cómodas para crear estrategias de su interés.
El diálogo siempre será la mejor opción, pero no podemos desconocer o más bien no debemos olvidar a las fuerzas oscuras muy poderosas, las cuales siempre han desestabilizado a la nación con estrategias de sembrar terror cuando ven afectados sus intereses, en especial, económicos.
En Colombia continúan las muertes tristemente, pero no es que se incrementaron, es que los medios masivos de comunicación ahora le dan más cobertura. Nunca había visto en Win Sports, hablar sobre la masacre a indígenas en Nariño. Eso está bien, que se divulgue todo, sin embargo, hay que pensar sobre la táctica que hay.
Sentarse a hablar con todos los actores armados es acertado, muy complicado, pero alguien debe dar el primer paso. Y aquí pueden surgir varias dudas para entender la violencia reciente, pero empecemos, por lo menos, a no echarle la culpa únicamente a un sector.
«Reflexionemos sin romanticismo político. ¿A quién le conviene que haya violencia en Colombia? ¿Quién ordenó la muerte de Garzón? ¿A quién le interesa desestabilizar a este gobierno?”.
Ejemplo: Al ELN, a las disidenci as de las Farc y a las Farc que no apoyaron el acuerdo, son dos Farc distintas, les conviene incrementar violencia para mostrarse ‘poderosos’ y llegar a la mesa con ‘autoridad’.
A la élite oscura política, esa que dio la orden de asesinar a Gaitán, Galán, Álvaro Gómez o a Jaime Garzón, también le conviene generar terror, porque quiere volver al poder en 2026 a toda costa, y para hacerlo, necesita sabotear a este gobierno y crear violencia nueva, para luego salir como héroes. Lafaurie quiere crear grupos armados, ¿serán para su seguridad o por estrategia política?
Reflexionemos sin romanticismo político. ¿A quién le conviene que haya violencia en Colombia? ¿Quién ordenó la muerte de Garzón? ¿A quién le interesa desestabilizar a este gobierno? ¿Quién no quiere combatir al narcotráfico? ¿Quién se opone a producir la cantidad de tierra colombiana?…