En el 2021 el Gobierno Nacional se enorgullecía porque había logrado construir una de las últimas obras más importantes para Colombia, el puente binacional Espriella-Río Mataje, una construcción que había iniciado en el 2015 y que tras 6 años de trabajo pudo culminarse, o bueno eso parece.
La realidad es que este paso fronterizo se une a los dos más entre el país y Ecuador, el puente internacional Rumichaca que conecta Ipiales (Nariño) y Tulcán y el paso San Miguel (Putumayo) – Nueva Loja. Este sería el tercer punto que une a los dos territorios, sin embargo, hasta el momento el intercambio no ha ocurrido, a pesar de su inauguración esta vía sigue sin entrar en funcionamiento.
De qué sirve que el gobierno haya hecho la entrega de esta vía cuando la comunidad no puede usarla, y es que la acción no debe quedarse netamente en la parte física, antes que nada, es necesario dialogar con el país vecino y presionar para poner en funcionamiento este importante corredor.
Uno de los objetivos era beneficiar al Consejo Comunitario Alto Mira y Frontera de Tumaco, cosa que no ha ocurrido, por ello varias veces han protestado por la falta de disposición por parte del gobierno ecuatoriano. A pesar de los esfuerzos por el diálogo que ha querido entablar la mandataria de Tumaco, no ha sido escuchada.
Según lo manifestado por el gobierno saliente de Colombia todo esta listo de esta parte, lo que falta es la disposición del presidente Guillermo Lasso, que en primera instancia su excusa era la pandemia, después de ello el narcotráfico y la violencia, pero al parecer son los intereses económicos, entendiendo que a los ecuatorianos les sale más rentable comprar en Colombia que en su propio país.
En la construcción del capítulo Pacifico del Plan Nacional de Desarrollo que se viene realizando en primera instancia en los municipios costeros de Nariño, esta es una de las más fervientes necesidades expresadas por la Región Administrativa y de Planificación -RAP Pacífico- encargada de liderar el proceso de dialogo con las comunidades.
Todo Nariño espera que el próximo 29 de octubre en la socialización que se hará de este capítulo en Popayán el gobierno acoja esta necesidad como una de sus prioridades, de que sirve tener una vía en óptimas condiciones si el tránsito por ella es denegado. El nuevo gobierno debe hacer lo que el anterior no pudo, entablar un dialogo y concertar el funcionamiento del corredor binacional Espriella-Río Mataje.
Por: Christian Benítez Ramírez