Joan Sebastián Gómez Ceballos.

Nos falta empatía

En el territorio nacional hay preocupación por la masiva muerte de policías en medio del plan pistola, estas acciones violentas que se están presentando y que han causado indignación y total rechazo deben ser condenadas.

Estos ataques en contra de las autoridades, según se ha mencionado, tienen características similares a los escenarios que se vivieron en la época de Pablo Escobar.

Son insólitas y repugnantes estas acciones que se están ejecutando contra la fuerza pública, es repudiable que se ofrezca dinero por cada policía asesinado; solidaridad para ellos, que arriesgan sus vidas, día tras día por salvaguardar la nuestra, para quienes tienen la misión de enfrentar y combatir bandas delincuenciales que generan terror en el país y que viven atemorizando a la ciudadanía.

Resalto la ardua labor que desarrollan a diario para garantizar la seguridad de la comunidad, quienes dejan a sus familias y se ponen el uniforme y sus botas para patrullar por las vías y montañas del territorio colombiano, quienes seguramente salen de su hogar en comendados a Dios, a quien le pedirán que cuide de sus vidas y puedan llegar a casa al final del día sanos y salvos, abrazar a sus seres queridos.

Quedó grabado en mis recuerdos la imagen de un policía en alguna carretera del país, quien se encontraba arrodillado, alzando sus malos y elevando una oración al cielo, pidiendo que esta oleada de violencia cese y no haya más policías asesinados por estos grupos terroristas.

Debo decir que me uno a esa cadena de oración para que estos seres humanos valientes y guerreros no queden en nuestros recuerdos, sino que sigan con vida y haciendo lo que a ellos les gusta, cuidar la patria y defender la integridad ciudadana.  

Colombia necesita acciones que conduzcan a la paz, a la tolerancia y a la solidaridad. No se puede construir un país donde aún hay odio, rivalidad, ego, orgullo y envidia. Se necesita más empatía y más humildad para cambiar la historia de nuestra querida patria.  

Las cifras en lo transcurrido del año hasta el momento han dejado más de 30 policías asesinados y es lamentable y triste porque esto ha sucedido en actos del servicio. Espero que esta situación alarmante y desalentadora empiece a cambiar y la paz que tanto anhelamos se convierta en realidad, en donde cese la violencia y el dialogo sea la mejor arma para combatir la guerra.

Por: Joan Sebastián Gómez.